miércoles, 31 de diciembre de 2008

Cuestionario de trabajo.

Además de inducir el debate y facilitar informació n sobre los hechos, los cuestionarios pueden servir para descubrir actitudes. A un grupo de trabajadores agrícolas de Nicaragua se le formularon preguntas como las siguientes:

1. Beber leche después del trabajo es eficaz para prevenir la intoxicació n por plaguicidas.
Verdadero Falso

2. Todos los plaguicidas tienen el mismo efecto en la salud. Verdadero Falso

Se promovió un debate sobre actitudes invitando a los participantes con puntos de vista contrarios a exponer y justificar sus opiniones. En lugar de confirmar la respuesta “correcta”, el instructor identificó elementos ú tiles en las distintas actitudes que se expresaron.

martes, 30 de diciembre de 2008

Métodos orientados al desarrollo de actitudes y emociones

Las actitudes y emociones pueden realmente bloquear el aprendizaje e influir en la adopció n de medidas de salud y seguridad al reincorporarse al trabajo.

Escenificació n. Para analizar actitudes y promover un debate sobre los problemas de la exposició n a plaguicidas se recurrió con frecuencia a la escenificació n. Se entregó el siguiente guió n a tres trabajadores, que leyeron sus respectivos papeles al resto del grupo.
José: ¿Cuá l es el problema?
Rafael: Estoy a punto de claudicar. Dos trabajadores han
resultado intoxicados hoy, só lo una semana despué s de esa larga sesió n educativa. Aquí nunca cambia nada.
José: ¿Y qué esperabas? Los propietarios ni siquiera
acudieron a la sesió n.
Sara: Pero al menos organizaron una sesió n educativa
para los trabajadores. Eso ya es má s de lo que está n haciendo los propietarios de otras fincas.
José: Organizar una sesió n educativa es una cosa, ¿pero
qué hay del seguimiento? ¿Nos han facilitado duchas y equipos de protecció n individual?
Sara: ¿Has pensado alguna vez si los trabajadores tendrá n
algo que ver con esas intoxicaciones? ¿Có mo sabes que está n trabajando de una forma segura?
Rafael: No lo sé . Todo lo que sé es que esos dos chicos
está n hoy en el hospital y yo tengo que regresar a mi trabajo.

Este tipo de guiones se utilizaron para analizar los complejos problemas de la salud y seguridad de los plaguicidas y los mú lti- ples factores implicados en su resolució n, entre ellos la educa- ció n. En el debate que siguió , el educador preguntó al grupo si alguien compartía alguna de las actitudes expresadas por los trabajadores agrícolas en el guió n, se identificaron los obstá culos para resolver los problemas aludidos y se sugirieron estrategias para superarlos.

jueves, 25 de diciembre de 2008

PRINCIPALES SECTORES Y PROCESOS: RIESGOS PROFESIONALES Y CONTROLES (III)


Antes de almacenar madera verde, especialmente en lugares húmedos, pueden aplicarse fungicidas para evitar el desarrollo de hongos que produzcan coloraciones azules o negras en la madera (manchas). La aplicación de fungicidas puede hacerse también en la cadena de producción (habitualmente por rociado) o después de atar la madera (generalmente en tanques de inmersión). En el decenio de 1940 se introdujo la sal sódica del pentaclorofenol para controlar las manchas, aunque se reem- plazó en el decenio de 1960 por el tetraclorofenato, más soluble en agua. El clorofenato se ha dejado de utilizar en gran parte debido a la preocupación por sus efectos para la salud y la contaminación con dibenzo-p-dioxinas policloradas. Como susti- tutivos cabe citar el cloruro de amonio didecildimetílico, el 3-yo- do-2-propinil-butil-carbamato, el azaconazol, el bórax y el
2-(tiocianometiltio)benzotiazol, la mayoría de los cuales se han estudiado poco entre los trabajadores usuarios. A menudo no es necesario tratar la madera, especialmente la que se ha secado en cámara. La procedente de algunas especies, como el cedro rojo occidental, no presenta nunca manchas.
Antes o después del secado, la madera puede comercializarse como madera verde o basta; sin embargo, para la mayoría de los usos industriales debe someterse a elaboración adicional. La madera se corta a la medida definitiva y se labra en un taller de cepillado. Las cepilladoras se utilizan para reducir la madera a medidas estándar comercializables y para alisar la superficie. El cabezal de cepillado está formado por una serie de hojas de corte montadas sobre un cilindro que gira a alta velocidad. La operación suele realizarse con alimentación automática y en paralelo al grano de la madera. El cepillado suele realizarse simultáneamente por ambos lados del tablero. Las cepilladoras que trabajan los cuatro lados se denominan machihembradoras. A veces se utilizan molduradoras para redondear los bordes de la madera.
Tras la elaboración definitiva, la madera ha de clasificarse, apilarse y atarse con vistas al transporte. Estas operaciones están cada vez más automatizadas. En algunos talleres especializados, la madera se trata adicionalmente con agentes químicos utili- zados como conservantes o ignífugos, o para proteger su superficie del desgaste mecánico o de la intemperie. Por ejemplo, las traviesas de vías férreas, pilotes, postes de cercados, postes telefó- nicos u otros artículos de madera que hayan de estar en contacto con el suelo o el agua se tratan a presión con arseniato de cobre amoniacal o de cromatos, pentaclorofenol o creosota en aceite derivado del petróleo. También se utilizan tinturas y colorantes para mejorar su comercialización, y pinturas para sellar los extremos de los tableros o para añadir marcas de empresa.
El serrado y demás operaciones de transformación de la madera de las serrerías producen grandes cantidades de serrín y residuos. En muchas serrerías, los costeros y otras grandes piezas de madera se reducen a astillas. Las astilladoras suelen ser grandes discos giratorios con hojas rectas empotradas en la superficie y provistos de ranuras para que pasen las astillas. Estas se producen cuando se pasan los troncos o los desechos de meca- nizado por las hojas utilizando alimentación inclinada por gravedad, autoalimentación horizontal o alimentación automá- tica controlada. La acción de corte de la astilladora suele ser perpendicular a las hojas. Para los troncos enteros se utilizan diseños diferentes que para los costeros, cantos y otros trozos de madera residual. Es normal que la astilladora esté integrada en la sierra de cabecera para astillar los costeros inservibles. También se utilizan astilladoras independientes para los desechos del resto del taller. El serrín y las astillas de madera pueden venderse para fabricar pasta, tableros reconstituidos, para elementos de paisajismo, como combustible o para otros usos. La corteza, las astillas, el serrín y otros materiales también pueden quemarse, bien como combustible o como residuos.
Las grandes serrerías modernas suelen disponer de una consi- derable plantilla de técnicos de mantenimiento: operarios de limpieza, montadores (mecánica industrial), carpinteros, electri- cistas y otros trabajadores cualificados. Si no se dispone de venti- lación por aspiración localizada o los equipos no funcionan correctamente, puede acumularse material residual en la maquinaria, transportadores y suelos. Las correspondientes operaciones de limpieza suelen realizarse con aire comprimido para eliminar el polvo depositado en las máquinas, suelos y otras superficies. Es preciso inspeccionar las sierras periódicamente en busca de dientes rotos, grietas u otros defectos, y equilibrarlas correctamente para evitar vibraciones. De esto se ocupan unos profesionales típicos de la industria maderera: los afiladores, que son responsables de afilar, reconstruir los dientes y otras tareas de mantenimiento de sierras circulares y sierras de cinta.

martes, 23 de diciembre de 2008

PRINCIPALES SECTORES Y PROCESOS: RIESGOS PROFESIONALES Y CONTROLES (II)



La primera fase del aserrado, también conocida como troceado primario, se realiza en la sierra principal o sierra de cabecera. Esta es una sierra de cinta o sierra circular estacionaria de gran tamaño que se utiliza para cortar el tronco longitudinalmente. El tronco avanza y retrocede a través de ella mediante un carro móvil que puede hacerlo girar para obtener el corte óptimo. Otras veces se emplean varias sierras de cinta, especialmente con los troncos más pequeños. Los productos de la sierra de cabecera son un cuerpo de troza (el centro cuadrado del tronco), una serie de costeros (los bordes externos redondeados del tronco) y, en algunos casos, grandes tableros. En las serrerías es cada vez más normal utilizar rayos láser y rayos X como guías visuales y de corte a fin de optimizar el aprovechamiento de la madera y el tamaño y tipo de tableros producidos.
En el troceado secundario, el cuerpo de troza y los grandes tableros o costeros se transforman en productos de dimensiones funcionales. Para estas operaciones suelen utilizarse sierras de varias hojas paralelas: por ejemplo, sierras circulares cuádruples o una batería de sierras, circulares o de guillotina. Para cortar los tableros a un ancho prefijado se utilizan canteadoras, compuestas al menos por dos sierras paralelas, y para cortar a un largo prefijado se utilizan retestadoras. El canteado y retes tado suelen realizarse utilizando sierras circulares, aunque las canteadoras son a veces sierras de cinta. En las serrerías se suele disponer de sierras de cadena manuales para liberar la madera atrapada en el sistema por estar curvada o ensanchada. En las serrerías modernas, cada operación (por ej., sierra de cabecera, canteadora) suele ser responsabilidad de un solo operario, por lo general encerrado en una cabina. Además, es posible situar trabajadores entre las distintas operaciones en fases posteriores del troceado secundario para garantizar manualmente el correcto posicionamiento de los tableros para las siguientes operaciones.
Tras su elaboración en la serrería, los tableros se clasifican y seleccionan según sus dimensiones y calidad y se apilan manual o mecánicamente (véase la Figura 71.5). Si la madera se mani-pula manualmente, el área correspondiente recibe el nombre de “cadena verde”. En muchas fábricas modernas se han instalado cajones de clasificación automáticos que sustituyen a la laboriosa clasificación manual. A fin de aumentar la circulación del aire para acelerar el secado, pueden colocarse pequeños trozos de madera entre los tableros en el momento de apilarlos.
La madera de construcción puede secarse al aire libre o en cámaras de secado, en función de las condiciones climáticas locales y de la humedad de la madera verde, pero la madera de acabado se seca normalmente en cámara. Hay muchos tipos de secaderos. Los de compartimiento y los de alta temperatura son secaderos en serie. En los secaderos continuos, las pilas atadas pueden circular por el secadero en posición perpendicular o paralela, y la dirección de movimiento del aire puede ser perpendicular o paralela a los tableros. Como material aislante para los tubos de vapor de los secaderos se ha venido utilizando amianto.

domingo, 21 de diciembre de 2008

Peligros y precauciones: Riesgos ergonómicos

Con frecuencia, el personal que trabaja con ganado vacuno tiene que estar de pie, estirarse, inclinarse o hacer esfuerzos físicos en posturas mantenidas o inusuales. Presenta un riesgo mayor de padecer lesiones articulares en la espalda, las caderas y las rodillas. Hay varias actividades que suponen un riesgo ergonómico. Por ejemplo, asistir al parto de un animal grande puede obligar a adoptar una postura forzada e inhabitual, mientras que, con un animal pequeño, el trabajador puede verse forzado a permanecer en un entorno inclemente. Además, el trabajador puede lesio- narse al asistir a animales enfermos, cuyo comportamiento no es posible prever. Lo más frecuente es que se produzcan dolores articulares y de espalda debido a movimientos repetitivos, como el ordeño, durante el cual el trabajador puede verse obligado a ponerse en cuclillas o de rodillas repetidamente.
Se conocen otras enfermedades por acumulación de traumatismos, sobre todo en los responsables del ganado. Pueden deberse a un movimiento repetido o a frecuentes lesiones pequeñas.
Las soluciones para reducir el riesgo ergonómico radican en enseñar a manejar adecuadamente a los animales, así como en rediseñar el medio de trabajo y las tareas de acomodación de los factores animales y humanos.

sábado, 20 de diciembre de 2008

CRIA DE ANIMALES DOMESTICOS

La cría de animales domésticos —y su utilización— abarca una amplia variedad de actividades, como la cría, la alimentación, el traslado de los animales de un sitio a otro, los cuidados básicos (p. ej. cuidado de las pezuñas, limpieza, vacunaciones), el cuidado de animales heridos (ya sea por lo ganaderos o por veterinarios) y las actividades asociadas con animales concretos (p. ej. ordeñar las vacas, esquilar a las ovejas, trabajar con animales de tiro).
Estas maniobras con el ganado se asocian con diversas lesiones y enfermedades en el hombre, debidas a la exposición directa o bien a la contaminación ambiental de origen animal. El riesgo de cada lesión y enfermedad depende mucho del comportamiento del animal concreto (véanse también los artículos de este capítulo sobre animales específicos). Además, a menudo las personas relacionadas con la cría de animales domésticos tienen más probabilidades de consumir productos derivados de éstos. Finalmente, la exposición específica depende de los métodos de manejo del ganado, influidos por factores geográficos y sociales que varían en la sociedad humana

viernes, 19 de diciembre de 2008

Protección de los trabajadores: Ruido.

Hay que suministrar orejeras y lograr que los trabajadores se las pongan para trabajar en las instalaciones cuando se vaya a vacunar a los animales o vayan a practicarse otras manio- bras. Debe ponerse en marcha un programa de conservación de la audición.

jueves, 18 de diciembre de 2008

Material de plantación

Son varias las tecnologías aplicadas para producir plantones o árboles jóvenes, y de ellas depende la ergonomía de las plantaciones. En terreno plano puede realizarse con máquinas plantadoras; el papel del trabajador se limita entonces a alimentar la máquina manualmente o a un mero control de calidad. Ahora bien, en casi todos los países y situaciones, la preparación de la zona se hace de manera mecánica, aunque la plantación en sí sigue haciéndose a mano.
En la mayoría de los casos de reforestación (p. ej., tras un incendio o una corta a hecho) o de forestación se utilizan plantones de 25 a 50 cm de altura. Los plantones son de raíz desnuda o criados en envases. Los envases más comunes en los países tropicales tienen de 600 a 1.000 cm3 y pueden distribuirse en bandejas de plástico o espuma de estireno, en las que suelen caber de 40 a 70 unidades idénticas. Para algunos fines se requieren plantas más grandes, de 80 a 200 cm, que suelen ser de raíz desnuda.
La plantación de árboles es estacional porque, ya que depende de que el clima sea lluvioso y/o fresco. La estación dura de 30 a 90 días en la mayoría de las regiones. Aunque pueda parecer una ocupación estacional menor, la plantación de árboles debe considerarse una importante actividad estratégica a largo plazo donde los bosques son una industria importante, tanto por motivos ecológicos como económicos.
La información aquí presentada se basa sobre todo en el modelo canadiense, pero muchas de estas cuestiones pueden extrapolarse a otros países de características geográficas y económicas similares. Se abordan también prácticas específicas y consideraciones para la seguridad y la salud en países en desarrollo.

miércoles, 17 de diciembre de 2008

PLANTACION DE ARBOLES

Los árboles se plantan colocando plantones o árboles jóvenes en la tierra. Se hace sobre todo para repoblar un bosque talado, crear un coto forestal o dar un nuevo uso a una parcela de terreno (p. ej., de pasto a coto forestal, o bien para controlar la erosión en una pendiente abrupta). Los proyectos de plantación pueden ascender a varios millones de plantas, y ser ejecutados por contratistas privados al servicio de los propietarios de los bosques, por fabricantes de papel y pasta de papel, por servicios forestales estatales, por organizaciones no gubernamentales o por cooperativas. En algunos países, las plantaciones se han convertido en una verdadera industria. En este sentido, queda excluida la plantación de grandes árboles individuales, que se considera más bien una actividad paisajística que forestal.
Entre los trabajadores de este sector cabe citar a los propios plantadores; al personal encargado de los viveros; a los trabaja- dores dedicados al transporte y mantenimiento de las plantas, al apoyo y la logística (p. ej., gestión, cocina, conducción y mantenimiento de vehículos, etc.), y a los inspectores de control de calidad. Las mujeres representan del 10 al 15 % de las plantillas de plantación. Como muestra de la importancia de esta industria y de la escala de sus actividades en regiones donde la silvi- cultura es un recurso importante, el gobierno provincial de Quebec, Canadá, se fijó en 1988 el objetivo de plantar 250 millones de plantones.

martes, 16 de diciembre de 2008

Factores relacionados con los riesgos del aprovechamiento

Como el aprovechamiento no maderero, por naturaleza, se realiza al aire libre, está sujeto a condiciones meteorológicas variables y otros factores naturales, y es un trabajo que no está mecanizado por lo general, los trabajadores están especialmente sujetos a los efectos ambientales de la geografía, la topografía, el clima y la estación. Después de considerables esfuerzos físicos, las condiciones climáticas pueden propiciar la aparición de problemas de salud y accidentes relacionados con el trabajo (véase la Tabla 68.3).
Las operaciones de aprovechamiento no maderero suelen realizarse en zonas alejadas, lo que implica una forma de riesgo debido a la falta de proximidad de atención médica en caso de accidente. No supone, desde luego, que aumente el número de accidentes, pero puede aumentar la gravedad de las posibles lesiones.

lunes, 15 de diciembre de 2008

Riesgos y su prevención (IV)


La maquinaria y los equipos utilizados en los centros de producción cárnica genera un nivel de ruido elevado. Han de suministrarse a los trabajadores tapones para los oídos, y debe someterse a las plantillas a exploraciones médicas para determinar la posibilidad de pérdidas auditivas. Asimismo, siempre que sea posible, se aplicarán dispositivos de atenuación del ruido en la maquinaria. Un mantenimiento adecuado de los sistemas de transporte puede evitar la emisión de ruido innecesario.
Los trabajadores pueden verse expuestos al contacto con productos químicos tóxicos durante las operaciones de limpieza e higienización de los equipos. Entre los compuestos utilizados al efecto figuran los limpiadores alcalinos (cáusticos) y ácidos. Se trata de productos que pueden provocar sequedad, erupciones alérgicas y otros problemas dérmicos. Los líquidos pueden salpicar y producir quemaduras en los ojos. Dependiendo del tipo de compuesto limpiador aplicado, debe emplearse el EPP pertinente (incluidos los protectores de ojos, cara y brazos, delantales y calzado protector). Además, debe disponerse de instalaciones para el lavado de manos y ojos. Las mangas de aire comprimido utilizadas en el transporte de agua caliente para desinfectar los equipos también pueden causar quemaduras. Es importante impartir una formación adecuada al personal acerca de la utilización de estos instrumentos. Asimismo, el cloro presente en el agua empleada para lavar las canales puede irritar los ojos, la garganta y la piel. Han comenzado a aplicarse nuevos enjuagues antibacterianos en los mataderos para reducir las bacterias que pueden provocar enfermedades originadas en los alimentos. Es necesario garantizar una ventilación apropiada. Deben tomarse todas las precauciones necesarias para asegurar que la concentración de los productos químicos no exceda lo estipulado por los fabricantes en las instrucciones.
El amoníaco se utiliza como refrigerante en la industria, y las fugas de esta sustancia de los conductos que lo transportan son habituales. El gas amoníaco irrita los ojos y la piel. Una exposi- ción de leve a moderada a este gas puede provocar migrañas, escozor en la garganta, transpiración, náuseas y vómitos. Si no es posible evitar su contacto, puede producirse una irritación grave del tracto respiratorio que genera tos, edema pulmonar o paro respiratorio. Un mantenimiento adecuado de los conductos de la refrigeración es esencial para prevenir estas fugas. Además, una vez detectado el escape de amoníaco, deben observarse los procedimientos de vigilancia y evacuación para evitar exposiciones peligrosas. El dióxido de carbono(CO2) en forma de hielo seco se utiliza en el área de envasado. En este proceso, el gas CO2 puede salir de su depósito y expandirse por toda la sala. La exposición al mismo puede producir migrañas, mareos, náuseas, vómitos y, en casos extremos, la muerte. Debe garantizarse una ventilación adecuada.
Los depósitos de sangre plantean riesgos asociados a los espa-cios restringidos si en el centro de producción en cuestión no se utiliza un sistema cerrado de tratamiento y conducción por tuberías de la misma. Las sustancias tóxicas emitidas por la sangre en descomposición y la falta de oxígeno constituyen un grave peligro para las personas que deben acceder y/o limpiar los depósitos o trabajar en el área circundante. Antes de entrar, debe comprobarse la presencia en la atmósfera de productos químicos tóxicos y asegurarse la existencia de la cantidad de oxígeno apropiada.
Los trabajadores están expuestos a enfermedades infecciosas como la brucelosis, la erisipela, la leptospirosis, la dermatofitosis y la aparición de verrugas.
La brucelosis está causada por una bacteria y se transmite por la manipulación de ganado vacuno o porcino infectado. Las personas infectadas por esta bacteria experimentan una fiebre constante o recurrente, migrañas, debilidad, dolor articular, sudores nocturnos y pérdida de apetito. La limitación del número de reses infectadas que son sacrificadas es una vía fundamental para la prevención de esta enfermedad.
La erisipela y la leptospirosis también tienen su causa en las bacterias. La primera se transmite mediante la infección de heridas, arañazos y abrasiones; produce enrojecimiento e irrita- ción alrededor del lugar de la infección y puede extenderse a la corriente sanguínea y a los ganglios linfáticos.
La leptospirosis se transmite por contacto directo con animales infectados o con agua, tierra mojada o vegetales conta- minados por la orina de los mismos. Pueden producirse dolores musculares, infecciones oculares, fiebre, vómitos, escalofríos y migrañas, y deteriorarse los riñones y el hígado.
La dermatofitosis, por su parte, es una enfermedad micótica y se transmite por el contacto con el pelo y la piel de personas o animales infectados. Conocida también como tiña, provoca la caída del pelo y el desarrollo de pequeñas costras amarillentas en forma de copa sobre el cuero cabelludo.

domingo, 14 de diciembre de 2008

Riesgos y su prevención (III)


La carga de canales (que pueden llegar a pesar 140 kg) y el levantamiento reiterado de cajas de carne de 30 kg preparadas para su transporte puede producir lesiones en la espalda. Los trastornos por traumatismos acumulados como el síndrome del túnel del carpo bilateral, la tendinitis y la tenosinovitis son comunes en este sector. En Estados Unidos, por ejemplo, las operaciones de elaboración de la carne registran tasas de estas dolencias superiores a las del resto de los sectores. Muñecas, codos y hombros resultan afectados. La causa puede residir en la naturaleza forzada y altamente repetitiva del trabajo en las cadenas de montaje de los centros productivos, en la utilización de equipos vibratorios en algunas actividades, en el empleo de cuchillos romos, en el corte de carne congelada y en la aplicación de mangueras de aire comprimido en las tareas de limpieza. La prevención de estos trastornos se basa en el diseño ergonómico de los equipos, la utilización de ayudas mecánicas, el mantenimiento exhaustivo de los equipos que generan vibración para reducir ésta al mínimo y la mejora de la formación de los trabajadores y de los programas médicos. Entre las medidas de diseño ergonómico se cuentan:
• el descenso de los transportadores elevados para reducir los lanzamientos repetitivos por encima de la cabeza en las líneas de producción (véase la Figura 67.4);
• el desplazamiento de las plataformas horizontales para
permitir a los trabajadores trocear los animales con un número mínimo de movimientos;
• la disponibilidad de cuchillos afilados con mangos de diseño renovado;
• la incorporación de ayudas mecánicas que reduzcan la fuerza aplicada en cada tarea (véase la Figura 67.5);
• el aumento del personal asignado a las actividades que requieren una gran fuerza, asegurando la disponibilidad de herramientas de mano del tamaño adecuado y de guantes y un diseño apropiado de las áreas de elaboración, con el fin dereducir al mínimo los giros al izar pesos y los levantamientos realizados desde debajo de las rodillas y por encima de los hombros,
• la dotación de elevadores por vacío y otros dispositivos de elevación mecánica para reducir el levantamiento de cajas (véase la Figura 67.6).



Los pasillos y pasarelas deben mantenerse secos y libres de obstáculos para garantizar la seguridad en el transporte de cargas pesadas.
Los trabajadores han de recibir formación sobre la utilización correcta de los cuchillos. El corte de carne congelada debe evitarse rigurosamente.
Asimismo, es aconsejable una intervención y un tratamiento médicos precoces de los trabajadores sintomáticos. Debido al carácter similar de los factores de estrés en los trabajos de esta industria, la rotación de puestos debe emplearse con precaución. Deben efectuarse y revisarse análisis de los puestos de trabajo para conseguir que no se utilicen los mismos grupos de tendones en tareas diferentes. Además, los trabajadores deben ser instruidos pertinentemente en todos los puestos que formen parte de una rotación planificada.

sábado, 13 de diciembre de 2008

Riesgos y su prevención (II)

Los trabajadores que mantienen, limpian o desatascan equipos como cintas transportadoras, máquinas elaboradoras de tocino, picadoras y otros dispositivos, se exponen al riesgo de un arranque inadvertido de los equipos. Es un tipo de accidente que ha causado muertes y amputaciones. Algunas máquinas se limpian en funcionamiento, lo que expone a los trabajadores al peligro de quedar atrapados por las mismas.
Los trabajadores deben recibir formación sobre procedimientos de bloqueo y carteles de advertencia. La aplicación de procedimientos que impiden que el personal arregle, limpie o desatasque equipos hasta que éstos estén apagados y bloqueados evitará lesiones. Los trabajadores encargados del bloqueo de los distintos dispositivos deben ser instruidos acerca de los procedimientos de neutralización de todas las fuentes de energía.
Los suelos y escaleras mojados y resbaladizos en los centros de producción representan un grave riesgo para el personal. Las plataformas de trabajo elevadas también plantean riesgos de caídas. Los trabajadores deben utilizar calzado de seguridad con suelas antideslizantes. Las superficies antideslizantes y rugosas, aprobadas por los organismos sanitarios locales, pueden y deben emplearse en suelos y escaleras. Ha de garantizarse un drenaje adecuado en las áreas húmedas y la conservación eficaz y opor- tuna de los suelos durante las horas de producción, con el fin de reducir al mínimo la existencia de superficies mojadas y resbaladizas. Asimismo, todas las superficies elevadas deben equiparse con barandillas de seguridad para evitar que entren en contacto con los trabajadores, que éstos sufran caídas accidentales y que caigan materiales de los transportadores. Además, se utilizarán tablas de pie sobre estos andamios en caso necesario. Las baran dillas deben instalarse asimismo en las escaleras de las instalaciones productivas para prevenir los resbalones.
La combinación en el lugar de trabajo de la humedad y de un cableado eléctrico complejo supone un riesgo de electrocución para los trabajadores. Todos los equipos deben dotarse de tomas de tierra adecuadas. Debe disponerse de cajas de toma de corriente eléctrica con tapas que protejan con eficacia contra los contactos accidentales. El cableado eléctrico ha de someterse a revisiones periódicas para examinar la existencia de grietas, signos de desgaste u otros defectos y todos los equipos deben ponerse a tierra. Se utilizarán siempre que sea posible interruptores de circuito de avería por puesta a tierra.

jueves, 11 de diciembre de 2008

Morbilidad: Pérdida de oído

Se sabe que el ruido excesivo es causa de pé rdida de agudeza auditiva entre los trabajadores de la industria de procesamiento de pescado. El personal de la sala de má quinas de los buques corre un grave riesgo, al igual que quienes trabajan con equipo antiguo en el procesamiento de pescado. Es necesario organizar programas para la conservació n de las facultades auditivas.

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Morbilidad: Asma profesional

El asma profesional se observa con frecuencia entre los trabajadores de la industria pesquera. Está relacionada con diversos tipos de pescado, pero generalmente se asocia con la exposición a los crustá ceos y moluscos; por ejemplo, camarones, cangrejos, almejas, etc. La producción de harina de pescado, al igual que procesos similares, como el pelado (en particular, el pelado de camarones), se han relacionado también con el asma.

martes, 9 de diciembre de 2008

Morbilidad

La información sobre la salud en general de los pescadores y sus perspectivas generales de enfermedad se obtiene principalmente de dos tipos de informes. Una fuente son las series de casos recopiladas por los mé dicos de a bordo y otra los informes de consejo mé dico, donde se indican las evacuaciones, hospitalizaciones y repatriaciones. Por desgracia, la mayoría de estos informes, si no todos, só lo mencionan el nú mero de pacientes y porcentajes.
Los estados no traumá ticos mencionados con más frecuencia y que requieren consulta y hospitalización son resultado de enfermedades dentales, gastrointestinales, musculosquelé ticas, psiquiá triconeurológicas, respiratorias, cardiológicas y dermatoló gicas. En una serie notificada por un mé dico de navío, las enfermedades psiquiá tricas aparecían como la razón más frecuente de evacuación de los trabajadores de arrastreros en travesías prolongadas, ocupando las lesiones un segundo lugar. En otra serie, las enfermedades que con má s frecuencia hicieron necesaria la repatriació n fueron las cardioló gicas y psiquiá tricas.

lunes, 8 de diciembre de 2008

Gases refrigerantes

La refrigeració n se utiliza para enfriar el mosto caliente antes de la fermentación y con fines de almacenamiento. Un vertido accidental de refrigerantes puede producir graves efectos tó xicos e irritantes. En el pasado, los más utilizados eran clorometano, bromoetano, dióxido de azufre y amoniaco, pero actualmente se utiliza sobre todo el amoniaco. Una ventilación adecuada y un mantenimiento cuidadoso evitará n la mayoría de los riesgos, pero se deben instalar detectores de fugas y aparatos respiradores de aire comprimido para emergencias, que serán probados con frecuencia. También puede ser necesario tomar precauciones contra los riesgos de explosión (por ejemplo, accesorios elé ctricos a prueba de llama, eliminación de los que están expuestos al aire).

domingo, 7 de diciembre de 2008

Gas

Se han dado casos de intoxicación por gas durante el revestimiento de tinajas con recubrimientos protectores que contenían sustancias tó xicas como tricloroetileno. Se deben tomar precauciones similares a las mencionadas anteriormente para el dió xido de carbono.

sábado, 6 de diciembre de 2008

Dióxido de carbono

El dió xido de carbono (CO2) se forma durante la fermentació n y está presente en los tanques de fermentació n y en las tinajas y barriles que han contenido cerveza. Concentraciones del 10 %, aun cuando se respiren durante poco tiempo, producen inconsciencia, asfixia y, en su caso, la muerte. El dióxido de carbono es má s pesado que el aire, por lo que es esencial una ventilación eficaz con extracció n a bajo nivel en todas las cá maras de fermentación en que se empleen tinajas abiertas. Dado que el gas es imperceptible a los sentidos, debe instalarse un sistema acú stico de alarma que se ponga en marcha inmediatamente si la ventilació n falla. La limpieza de espacios confinados presenta serios riesgos: antes de permitir el acceso de los trabajadores, ha de expulsarse el gas por medio de ventiladores mó viles; se debe disponer de cinturones de seguridad, cuerdas salvavidas y equipo de protecció n respiratoria del tipo de aire comprimido o de suministro de aire y otro trabajador debe hacer guardia para vigilar y, en caso necesario, rescatar al que está en el interior.

viernes, 5 de diciembre de 2008

Métodos utilizados con fines de información: Diapositivas.

Las diapositivas con imá genes o problemas familiares se utilizaron de la misma forma que el caballete de hojas mó viles. Con fotografías tomadas durante la fase de evaluación de las necesidades se organizó una sesión de diapositivas siguiendo el proceso de la utilización de plaguicidas, desde su selección y adquisició n hasta su eliminació n y limpieza al final de la jornada de trabajo.

jueves, 4 de diciembre de 2008

Métodos utilizados con fines de información: Caballete de hojas móviles

En Nicaragua, el equipo del proyecto necesitaba herramientas didá cticas visuales que pudieran transportarse fá cilmente y cuyo uso no dependiera de la electricidad, de manera que pudieran utilizarse en los campos o durante las exploraciones mé dicas en las propiedades. El caballete de hojas mó viles contenía 18 dibujos que representaban situaciones de la vida real y que pretendían servir para fomentar los debates. Cada dibujo se asociaba a unos objetivos específicos y a unas preguntas clave que se subrayaban en el manual de los educadores.
El caballete de hojas mó viles podía utilizarse tanto para facilitar información como para promover el aná lisis de problemas y la elaboració n de planes de acción. Por ejemplo, uno de los dibujos se utilizó para facilitar información sobre las rutas de entrada preguntando “¿Có mo se introducen los plaguicidas en el organismo?” Para iniciar el aná lisis del problema de la intoxicación por plaguicidas, el educador preguntaba a los participantes:
“¿Qué está pasando aquí? ¿Les resulta familiar esta escena?
¿Por qué ocurre? ¿Qué podemos hacer al respecto?” Mostrando a dos o más personas un mismo dibujo (de dos personas que entraban en un campo recién fumigado), se desencadenaba un debate sobre las posibles motivaciones y sentimientos. “¿Por qué está leyendo el cartel? ¿Por qué se fue directamente a la zona recién fumigada?” Con imá genes visuales eficaces, el propio dibujo puede suscitar diferentes debates, dependiendo de cada grupo.

miércoles, 3 de diciembre de 2008

Mé todos y objetivos de la educación

La siguiente etapa en el proceso de educació n fue seleccionar los temas que debían tratarse basándose en la información recabada de los propios trabajadores y, a continuación, seleccionar mé todos de enseñ anza adecuados basá ndose en los objetivos del aprendizaje. La educación tenía cuatro objetivos: informar; identificar y cambiar actitudes/emociones; promover conductas saludables; y desarrollar destrezas para la acció n y la resolució n de problemas. A continuació n se ofrecen algunos ejemplos de los mé todos utilizados, agrupados en función del objetivo que perseguían e incorporados a un programa educativo de dos días de duración (Wallerstein y Weinger 1992).

lunes, 1 de diciembre de 2008

PRINCIPALES SECTORES Y PROCESOS: RIESGOS PROFESIONALES Y CONTROLES



Proceso de aserrado
Las serrerías pueden ser de muy diversos tamaños. Las más pequeñas son unidades fijas o portátiles constituidas por una sierra principal circular, un sencillo carro portatroncos y una canteadora doble (véanse descripciones a continuación) accionadas por un motor de gasolina o diesel y manejadas por uno o dos trabajadores. Las más grandes son estructuras permanentes, disponen de equipos mucho más elaborados y especializados y pueden emplear a más de 1.000 trabajadores. En función del tamaño de la fábrica y del clima de la región, las operaciones pueden realizarse en el interior o al aire libre. Aunque el tipo y el tamaño de los troncos determinan en gran medida el tipo de equipos necesarios, éstos varían también considerablemente en función de la antigüedad y las dimensiones de la instalación, así como del tipo y la calidad de los tableros fabricados. A continuación se describen algunos de los procesos que tienen lugar en una serrería típica.
Una vez transportados a la serrería, los troncos se almacenan en tierra, en masas de agua próximas a la fábrica o en estanques construidos para tal fin (véanse las Figuras 71.2 y 71.3). Para ello se clasifican según su calidad, especie u otras características. En las áreas de almacenamiento en tierra suelen utilizarse fungi- cidas e insecticidas si los troncos van a permanecer almacenados mucho tiempo hasta su transformación. Primero se nivelan los extremos de los troncos con una sierra tronzadora ya sea antes o después del descortezado y como paso previo a la elaboración posterior. El descortezado puede realizarse por varios métodos. Entre los mecánicos cabe citar el desenrollo periférico, en el que se hacen girar los troncos presionándolos contra cuchillas; el descortezado anular, en el que se presionan puntas de herramientas contra el tronco; la abrasión por rozamiento de la madera, que se consigue batiendo los troncos entre sí en un tambor giratorio; y la utilización de cadenas para arrancar la corteza. El descortezado puede realizarse también por medios hidráulicos, utilizando chorros de agua de alta presión. Los troncos y tableros obtenidos tras el descortezado y demás operaciones de la serrería se trasladan de una operación a la siguiente por medio de un sistema de transportadores, cintas y rodillos. En las serrerías grandes, estos sistemas pueden ser bastante complejos (véase la Figura 71.4).

sábado, 29 de noviembre de 2008

PERFIL GENERAL (III)


Casi todos los árboles destinados a la fabricación de productos y estructuras de madera se transforman primero en las serrerías. Por consiguiente, en todas las regiones del mundo donde se utiliza madera con fines industriales existen serrerías. La Tabla 71.1 presenta las estadísticas de 1990 relativas al volumen de madera cortada para combustible y usos industriales en los principales países productores de cada continente, así como los volúmenes cortados en troncos para el aserrado de chapa, que es una subcategoría de madera industrial y consti- tuye una materia prima para las industrias descritas en el presente capítulo. En los países desarrollados, la mayoría de la madera cortada se destina a usos industriales: se incluyen aquí los troncos para el aserrado de chapa, pasta de madera, astillas, partículas y residuos. En 1990, tres países —Estados Unidos, la antigua URSS y Canadá— produjeron más de la mitad del total de la madera industrial del mundo, así como más de la mitad de los troncos destinados a aserraderos de chapa. En cambio, en muchos de los países en desarrollo de Asia, Africa y Sudamérica, la mayoría de la madera cortada se utiliza para combustible.
La Tabla 71.2 indica los principales productores mundiales de madera maciza elaborada, contrachapado, tableros de partículas y tableros de fibra. Los tres mayores productores de madera industrial también representan en total más de la mitad de la producción mundial de tableros de madera maciza y se cuentan entre los cinco primeros en cada una de las categorías de tableros manufacturados. El volumen de tableros manufacturados en todo el mundo es relativamente pequeño en compara- ción con el de tableros de madera maciza, pero las industrias de tableros manufacturados crecen a mayor velocidad. Mientras que la producción de tableros de madera maciza aumentó un 13 % entre 1980 y 1990, los volúmenes de contrachapado, tableros de partículas y tableros de fibra crecieron el 21 %, 25 % y 19 % respectivamente.
La proporción de trabajadores de la población activa empleados en las industrias de productos de la madera es generalmente de un 1 % o menos, incluso en países con una gran industria forestal, como Estados Unidos (0,6 %), Canadá (0,9 %), Suecia (0,8 %), Finlandia (1,2 %), Malasia (0,4 %), Indonesia (1,4 %) y Brasil (0,4 %) (OIT, 1993). Aunque puede haber algunas serrerías situadas cerca de áreas urbanas, la mayoría tienden a situarse cerca de los bosques de los que obtienen sus troncos, y muchas se emplazan en comunidades pequeñas y a menudo aisladas, donde en ocasiones son la única fuente importante de empleo y el componente más importante de la economía local.
La industria maderera emplea a centenares de miles de trabajadores en todo el mundo, aunque resulta difícil calcular cifras exactas a escala internacional. En 1987 había en Estados Unidos180.000 personas trabajando en serrerías y talleres de cepillado,59.000 en la fabricación de contrachapado y 18.000 en la fabricación de tableros de partículas y de fibra (Oficina del Censo, 1987). En 1991 había en Canadá 68.400 personas trabajando en serrerías y talleres de cepillado y 8.500 en la fabricación de contrachapado (Statistics Canada, 1993). Aunque la producción de madera aumenta, el número de trabajadores de serrerías disminuye a consecuencia de la mecanización y la auto- matización. El número de trabajadores de serrerías y talleres de mecanizado en Estados Unidos era un 17 % mayor en 1977 que en 1987, y en Canadá era un 13 % mayor en 1986 que en 1991. Se han observado reducciones similares en otros países, como Suecia, donde se están eliminando las operaciones más pequeñas y menos eficientes en favor del trabajo en talleres de mucha mayor capacidad y provistos de modernos equipos. La mayoría de los puestos de trabajo eliminados correspondían a tareas de baja cualificación, como las de clasificación o avance de la madera.

jueves, 27 de noviembre de 2008

Protección de los trabajadores: Exposición a partículas

. Para controlar la exposición a partículas deben utilizarse procedimientos simples de gestión, como los equipos de alimentación automática diseñados para eliminar el máximo posible de polvo. La adición de grasa extra a la dieta, la limpieza frecuente y con máquinas de las instalaciones y la insta- lación de suelos de rejilla que se limpian con facilidad, son medidas de control de probada eficacia. En la actualidad se está estudiando un sistema de control del polvo mediante vaporización de aceite, que probablemente estará disponible en el futuro. Aparte del control técnico, se debe llevar una mascarilla para el polvo que sea de buena calidad.

martes, 25 de noviembre de 2008

Protección de los trabajadores: Exposición aguda al ácido sulfhídrico

Hay que tener cuidado para evitar la exposición al H2S que puede producirse al agitar un tanque de depósito de estiércol líquido anaerobio. Si el depósito está debajo de la instalación, mientras dure el vaciado y en las horas siguientes es mejor permanecer fuera hasta que el análisis de una muestra de aire indique que es seguro. Durante este tiempo hay que poner la ventilación al máximo. Nunca se debe entrar en un depósito de estiércol líquido sin tomar las medidas mencionadas.

domingo, 23 de noviembre de 2008

Control y prevención de riesgos


Las operaciones de corta merecen una mención especial, ya que puede afirmarse que es la fuente más clara y común de riesgos asociados al aprovechamiento de productos forestales no made- reros. Van ligados a la elección de las herramientas apropiadas y
a la calidad de las mismas, al tamaño y al tipo de corte requerido,
a la fuerza necesaria para realizar el corte, a la posición del trabajador y a su actitud.
En general, los riesgos de las operaciones de corta pueden reducirse o mitigarse mediante:
• formación directa sobre el trabajo: elección de herramientas apropiadas, mantenimiento y afilado de las herramientas y formación del trabajador con respecto a las técnicas biomecánicas apropiadas,
• formación en materia de organización del trabajo: planificación del trabajo, evaluación de riesgos y de seguridad, preparación de la zona y atención permanente del trabajador a la faenaya sus alrededores.
El objetivo de una buena formación con respecto a la técnica y los principios del trabajo debe ser: la planificación apropiada de éste, la implantación de medidas preventivas, el reconocimiento de los riesgos y medidas activas para evitarlos y la minimización de lesiones en caso de accidente.

viernes, 21 de noviembre de 2008

APROVECHAMIENTO DE PRODUCTOS FORESTALES NO MADEREROS


Entorno de trabajo

Son muchos los riesgos asociados al aprovechamiento de productos forestales no madereros, debido a la gran diversidad de éstos. A fin de definir mejor los riesgos, los productos no madereros pueden agruparse por categorías, con algunos ejemplos representativos. Así pueden identificarse con más facilidad los riesgos asociados a su obtención (véase la Tabla 68.2).
La explotación de productos no madereros se realiza por varias razones (subsistencia, usos comerciales o de ocio) y para cubrir diversas necesidades, lo que a su vez afecta a los riesgos asociados a la recogida. Por ejemplo, el recolector de setas aficionado tiene muchas menos probabilidades de exponerse a condiciones climáticas severas por estar al aire libre que el recolector comercial, quien se gana la vida con esta actividad y compite por un producto limitado a una cierta temporada.
La escala de las operaciones de explotación no madereras es variable, con efectos positivos y negativos en términos de posibles riesgos. Por naturaleza, el aprovechamiento no maderero suele estar a cargo de pequeños empresarios o de personas que se ganan la vida con ello. La seguridad de un trabajador solitario en lugares remotos es más problemática que la del que no lo está. La experiencia individual influye en la situación. Puede ocurrir una emergencia u otro acontecimiento que exija la intervención directa de asesores externos en materia de seguridad y salud. Con todo, ciertos productos no madereros se han comercializado, prestándose incluso al cultivo en plantaciones, como es el caso del bambú, las setas, los pertrechos navales de goma, ciertos frutos secos y el caucho, por nombrar algunos. En teoría, es más probable que las operaciones sujetas a comercialización proporcionen información sistemática en materia de salud y seguridad en el curso del trabajo, prestándole mayor atención.
En conjunto, los productos enumerados, el entorno forestal en el que existen y los métodos necesarios para obtenerlos pueden ir ligados a ciertos riesgos inherentes para la salud y la seguridad. Tales riesgos son bastante elementales, porque se derivan de acciones muy comunes, como trepar, cortar con herramientas de mano, cavar, recolectar, seleccionar y transportar manual- mente. Además, el aprovechamiento de un determinado producto alimentario puede incluir la exposición a agentes biológicos (plantas de superficie venenosa o serpientes venenosas), peligros biomécanicos (p. ej., debidos a movimientos repetitivos o al acarreo de cargas pesadas), condiciones climatológicas adversas, peligros para la seguridad derivados de las herramientas y técnicas utilizadas (como una laceración provocada por una técnica de corte negligente) y otros muchos que pueda entrañar un terreno abrupto, el atravesar un río o el trabajo a cierta altura del suelo).
Como los productos no madereros no suelen prestarse a la mecanización y su coste suele ser prohibitivo, la insistencia en su aprovechamiento manual o en el uso de animales de tiro para su aprovechamiento y transporte resulta desproporcionada en comparación con otras industrias.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Riesgos y su prevención (I)

La elaboración de la carne registra una de las mayores tasas de accidentes de la industria en conjunto. Un trabajador puede lesionarse por el contacto con los animales en movimiento que son trasladados en el redil al centro de producción. Debe impartirse al personal una formación adecuada sobre la manipulación de animales vivos y se recomienda una exposición mínima del trabajador en esta parte del proceso. Las pistolas utilizadas para aturdir a los animales pueden dispararse de modo prematuro o involuntario mientras los trabajadores tratan de calmarlos. La caída y las reacciones debidas al sistema nervioso en los animales aturdidos que provocan sacudidas suponen un riesgo para los trabajadores próximos. Además, en numerosas operaciones se utilizan ganchos, cadenas y raíles de vagonetas de transporte para trasladar los productos de una fase a otra del proceso, lo que constituye un riesgo de caída de éstos y de las canales.
Es necesario un mantenimiento adecuado de todos los equipos (en especial de los utilizados para transportar la carne), que han de comprobarse con frecuencia y repararse cuando sea oportuno. Deben adoptarse dispositivos de protección en la armas de golpeo, como interruptores de seguridad y medidas que garanticen la imposibilidad de un retroceso. Los trabaja- dores que llevan a cabo las tareas de golpeo y degüello deben ser instruidos acerca de los peligros de su puesto y equipados con cuchillos protegidos y dispositivos de protección para evitar las lesiones. En las operaciones de degüello deben emplearse defensas de brazos, guantes de malla y cuchillos protegidos especiales.
Tanto en el sacrificio como en diversas fases de la elaboración, se utilizan cuchillos de mano y otros dispositivos cortantes. Entre los de carácter mecánico figuran las cuchillas para cabezas y huesos, los tiradores de hocicos, las sierras eléctricas de banda o circulares, los cuchillos de hoja circular eléctricos o de aire comprimido, las trituradoras y las máquinas elaboradoras de tocino. Son tareas que registran una tasa de lesiones elevada, desde los cortes con cuchillos hasta las amputaciones, debido a la velocidad a la que operan los trabajadores, el peligro inherente a las herramientas empleadas y la naturaleza con frecuencia resbaladiza del producto derivado de los procesos en que intervienen grasas o líquidos. Los trabajadores pueden cortarse con sus propios cuchillos o con los de sus compañeros durante el proceso de preparación de la carne (véase la Figura 67.3).
Las operaciones mencionadas exigen la utilización de equipos de protección que incluyan casco, calzado, guantes y delantales de malla, defensas de la muñeca y el antebrazo y delantales impermeables. Puede ser necesario el empleo de gafas protec- toras en las actividades de deshuesado, preparación y corte, con el fin de evitar la entrada de cuerpos extraños en los ojos de los trabajadores. No deben utilizarse guantes de malla metálica al usar sierras motorizadas o eléctricas de cualquier tipo. Tanto éstas como otras herramientas motorizadas deben disponer de las salvaguardas pertinentes, como protectores de la hoja e interruptores de apagado. Las ruedas dentadas, cadenas, cintas transportadoras y otros dispositivos sin protección pueden constituir un riesgo. Todos ellos deben dotarse de los mecanismos de defensa oportunos. Asimismo, los cuchillos de mano también deben contar con protectores para evitar que la mano se deslice de la empuñadura a la hoja. La formación y la disposición del espacio suficiente entre trabajadores son necesarios para desempeñar las distintas tareas con seguridad.

lunes, 17 de noviembre de 2008

Elaboración

Una vez refrigeradas, las mitades de la canal se dividen en los cuartos delanteros y traseros. Después, estas piezas vuelven a subdividirse en piezas principales, de acuerdo con las especifica- ciones del cliente. Algunos cuartos se elaboran para su entrega como delanteros o traseros sin otras modificaciones significativas; pueden pesar de 75 a 125 kg. Muchos centros de producción
(en Estados Unidos, la mayoría) realizan más fases en la elaboración de la carne (otras sólo realizan esta parte del proceso y reciben la carne de los mataderos). Los productos de estos centros se transportan en cajas de unos 30 kg de peso.
Los cortes se realizan a mano o con sierras eléctricas en función de las necesidades, normalmente después de efectuar las operaciones oportunas para retirar la piel. Asimismo, muchos centros utilizan grandes trituradoras con el fin de obtener carne picada para hamburguesas, etcétera. La realización de otras tareas de elaboración pueden exigir el empleo de equipos como prensas para tocino, tambores giratorios para jamón cocido y extrusores, máquinas para rebanar tocino, dispositivos eléctricos para ablandar la carne y cámaras de ahumado. Las cintas trans- portadoras y las barrenas helicoidales suelen utilizarse para trasladar los productos. Las áreas de elaboración se mantienen a temperaturas que se sitúan en torno a los 4 °C. Los despojos como el hígado, el corazón, las mollejas, la lengua y las glándulas se tratan en una zona independiente.

Muchos centros de producción llevan a cabo un tratamiento inicial de las pieles antes de enviarlas para su curtido.

sábado, 15 de noviembre de 2008

Lesiones no mortales

Las lesiones no mortales son tambié n bastante frecuentes en la industria pesquera (vé ase la Tabla 66.2). Las partes del cuerpo má s afectadas son las manos, las extremidades inferiores, la cabeza y el cuello y las extremidades superiores, seguidas del pecho, la columna vertebral y el abdomen, en orden decreciente de frecuencia. Los tipos de traumatismos más comunes son heridas abiertas, fracturas, tensiones, esguinces y contusiones. Numerosas lesiones no mortales pueden ser graves, provocando, por ejemplo, la amputación de dedos, manos, brazos y piernas, así como lesiones en la cabeza y el cuello. Las infecciones, laceraciones y traumatismos menores de las manos y dedos son sumamente frecuentes y a menudo el mé dico del barco recomienda el tratamiento con antibió ticos en todos los casos.

jueves, 13 de noviembre de 2008

Accidentes mortales


Los accidentes mortales en el mar pueden estudiarse fá cilmente a travé s de los registros de mortalidad, pues en los certificados de segú n la Clasificació n internacional de enfermedades y se indica si la lesió n se sufrió mientras la víctima estaba empleada a bordo. Las tasas de mortalidad por accidente laboral de los trabajadores de la industria pesquera son altas, má s altas que las de muchos otros grupos profesionales en tierra. En la Tabla 66.1 se muestra el índice de mortalidad por 100.000 por causa de accidente laboral en varios países. Las lesiones mortales se clasifican tradi- cionalmente en: 1) accidentes individuales (es decir, individuos que caen al mar, son barridos de cubierta por la mar brava o sufren lesiones mortales causadas por la maquinaria) y 2) individuos perdidos por accidentes del buque (naufragio, vuelco, buques perdidos, explosiones e incendios). Ambas categorías está n relacionadas con las condiciones meteoroló gicas. El número de accidentes sufridos por individuos superan a los demás. La seguridad de un buque depende de su diseño, tamaño y tipo, así como de factores como la estabilidad, el francobordo, la estanqueidad y la protección estructural contra incendios. Una navegación negligente o errores de juicio pueden causar accidentes a los buques, y la fatiga producida por los turnos prolongados tambié n desempeñ a un papel y es causa importante de accidentes personales.
La reducció n de los accidentes en los buques má s modernos puede deberse a una mayor eficiencia té cnica y humana. La formación del personal, un mejor uso de los sistemas de flotación, una vestimenta adecuada y el empleo de monos de trabajo flotantes pueden aumentar las probabilidades de rescate en caso de accidente. En la industria pesquera en general, puede ser necesario un uso má s extendido de otras medidas de seguridad, como líneas de seguridad, casco y calzado de seguridad, tal como se expone en otra sección de esta Enciclopedia.

martes, 11 de noviembre de 2008

Electricidad

Debido a las condiciones de humedad reinantes, las instalaciones y el equipo elé ctrico necesitan una protección especial, y esto se aplica sobre todo a los aparatos portá tiles. Donde se precise, se deben instalar interruptores de circuitos conectados a tierra para las averías y, donde sea posible, utilizar voltajes bajos, especialmente en las lá mparas portá tiles de inspecció n. El vapor se utiliza mucho, por lo que son frecuentes las quemaduras y escaldaduras; se debe proporcionar aislamiento y protección a las tuberías y a los cierres de seguridad de las válvulas de vapor, que evitará n la liberación accidental de vapor.

domingo, 9 de noviembre de 2008

Maquinaria para la Industria de la Cerveza

Si la malta se almacena en silos, la abertura debe estar protegida y han de cumplirse obligatoriamente las normas en materia de entrada de personal, tal como se describe en el recuadro sobre espacios confinados de este capítulo. Las má quinas transportadoras se usan mucho en las plantas de embotellado; se puede evitar que los trabajadores queden enganchados entre las correas y tambores utilizando protecciones de maquinaria eficaces. Debe adoptarse un programa eficaz sobre bloqueo de má quinas y carteles de advertencia con fines de mantenimiento y reparació n. Donde existan vías de paso a travé s o por encima de las cintas transportadoras, se deben instalar botones de parada. En el proceso de llenado, las botellas que estallan pueden ocasionar lesiones muy graves; protecciones adecuadas para la maquinaria y protectores faciales, guantes de goma, delantales de goma y botas antideslizantes para los trabajadores pueden prevenir las lesiones.

viernes, 7 de noviembre de 2008

Educación de los trabajadores

Evaluación de las necesidades
La primera etapa en el desarrollo del programa de educació n era la evaluació n de necesidades o la “fase de escucha”, para identificar los problemas y obstá culos a un cambio real, reconocer los factores que podían facilitar el cambio, definir valores y creencias en los trabajadores agrícolas e identificar exposiciones y experiencias peligrosas que tenían que incorporarse al programa. El equipo del proyecto de Nicaragua recurrió a inspecciones in situ para observar las prá cticas de trabajo y las fuentes de exposición de los trabajadores a los plaguicidas. Se tomaron fotografías de los lugares y las prá cticas de trabajo con fines de documentación, aná lisis y debate durante las sesiones educativas. El equipo prestó también atención a los problemas emocionales que podían constituir barreras para la acción: la frustración de los trabaja- dores por una protecció n personal inadecuada, la ausencia de jabó n o agua o la inexistencia de alternativas seguras a los plaguicidas utilizados.

miércoles, 5 de noviembre de 2008

EDUCACION DE LOS TRABAJADORES AGRICOLAS SOBRE LOS PLAGUICIDAS: ESTUDIO DE UN CASO

En la finca San Antonio, varios trabajadores se intoxicaron al aplicar el plaguicida Lannate. Una investigació n del caso reveló que habían utilizado fumigadores colgados en la espalda sin llevar prendas protectoras, guantes o botas. El empleador nunca les había proporcionado el equipo necesario y tampoco disponían de jabón ni duchas. Después de las intoxicaciones, se obligó al empleador a emprender las acciones correctoras oportunas.
Cuando el Ministerio de Sanidad realizó una inspección de seguimiento, descubrió que muchos trabajadores seguían sin utilizar prendas ni equipos protectores. Cuando les preguntaron la razó n, algunos respondieron que el equipo les daba demasiado calor y era incó modo. Otros explicaron que habían trabajado así durante añ os y que nunca habían tenido problemas. Algunos comentaron que no necesitaban el equipo porque bebían grandes vasos de leche después de aplicar los plaguicidas.
Esta experiencia, que tuvo lugar en Nicaragua, es común en muchas partes del mundo e ilustra la necesidad de un programa eficaz de educació n de los trabajadores agrícolas. La educació n debe ir acompañ ada de la creación de un entorno de trabajo seguro y de la aplicació n de la legislación vigente, aunque tambié n tienen que considerarse las barreras que existen para la adopció n de unas prá cticas de trabajo seguras e incorporarlas a los programas de educació n. Estas barreras, como un entorno de trabajo poco seguro, la ausencia de equipos protectores y actitudes y creencias que no promueven la salud, deben abordarse directamente en las sesiones educativas y diseñ ar estrategias para su eliminación.
En este artículo se describe un programa de educación orientado a la acción incorporado a dos proyectos multidisciplinarios para solucionar los problemas de la intoxicació n de los trabaja- dores agrícolas por plaguicidas. Estos proyectos fueron desarrollados en Nicaragua por CARE, Nicaragua y el American Friends Service Committee (entre 1985 y 1989) y en la region centroamericana por la Organización Internacional del Trabajo (OIT, desde 1993 hasta la actualidad). Ademá s de su clara orientación educativa, el proyecto de Nicaragua desarrolló mé todos perfeccionados para mezclar y cargar los plaguicidas, un plan de vigilancia mé dica para diagnosticar en los trabajadores un exceso de exposició n a los plaguicidas y un sistema para recabar datos epidemioló gicos (Weinger y Lyons 1992). En su proyecto
multifacé tico, la OIT insistió en la necesidad de mejoras legisla- tivas, formació n y creació n de una red regional de educadores sobre los plaguicidas.
Los elementos bá sicos de ambos proyectos fueron la evaluación de las necesidades de educació n para adaptar el contenido del programa a la audiencia diana, el uso de una serie de mé todos de enseñ anza participativos (Weinger y Wallerstein 1990) y la elaboración de un manual para el educador y materiales didá cticos para facilitar el proceso de aprendizaje. Los temas tratados fueron los efectos de los plaguicidas en la salud, los síntomas de la intoxicació n por plaguicidas, los derechos de los trabajadores, los recursos y un componente de resolución de problemas que analizaba los obstá culos para un trabajo seguro y la manera de superarlos.
Aunque existían muchas similitudes entre los dos proyectos, el de Nicaragua hacía hincapie en la educación de los trabajadores, mientras que el proyecto regional se centraba en la formación de los educadores. En este artículo se ofrecen algunas directrices para la formació n tanto de los trabajadores como de los educadores.

domingo, 2 de noviembre de 2008

PERFIL GENERAL (II)

Los tableros manufacturados y de madera maciza pueden elaborarse a partir de una gran variedad de especies arbóreas. La elección se hace según la forma y el tamaño del árbol, las características físicas de la madera en sí, como su solidez o resistencia al deterioro, y sus propiedades estéticas. Se denomina madera dura la procedente de especies frondosas o de hojas anchas, clasificadas botánicamente como angiospermas, mientras que se conoce como madera blanda la que se obtiene de las coníferas o árboles de hojas aciculares, clasificados botánicamente como gimnospermas. Muchas maderas duras y algunas blandas que crecen en las regiones tropicales suelen recibir el nombre de maderas tropicales o exóticas. Aunque la mayoría de la madera cortada en todo el mundo (el 58 % del volumen) se obtiene de árboles no integrados en el grupo de las coníferas, gran parte de ella se consume como combustible, de modo que la mayoría de la que se destina a usos industriales (el 69 %) procede de coníferas (FAO, 1993). Esto puede reflejar en parte la distribución de los bosques en relación con el desarrollo indus- trial. Los mayores bosques de coníferas están emplazados en las regiones septentrionales de Norteamérica, Europa y Asia, mientras que los principales bosques de frondosas están situados tanto en regiones tropicales como templadas.

viernes, 31 de octubre de 2008

PERFIL GENERAL (I)

La industria maderera es una de las más importantes en todo el mundo dentro del ámbito del aprovechamiento de los recursos naturales. En la mayoría de los países se cortan árboles para diversos fines. Este capítulo se centra en la transformación de la madera para la producción de tableros de madera maciza y tableros manufacturados en serrerías y lugares afines. Se deno- minan tableros manufacturados los compuestos por elementos de madera de varios tamaños, desde chapas hasta fibras, que se mantienen unidos por medio de adhesivos químicos añadidos o por enlaces químicos “naturales”. La Figura 71.1 ofrece datos de la producción mundial. Sobre la base de las diferencias entre los procesos aplicados y los riesgos asociados, se distinguen en los tableros manufacturados tres grandes categorías: tableros de contrachapado, tableros de partículas y tableros de fibra. Se agrupan bajo el término tableros de partículas los materiales lami- nares fabricados a partir de pequeños trozos de madera, como astillas, escamas, hebras o tiras, y bajo el término tableros de fibra los paneles fabricados con fibras de madera, incluidos los tableros duros, los tableros de fibras de densidad media (FDM) y los tableros aislantes. Aparte de la producción de tableros, el otro uso industrial importante de la madera es la fabricación de papel y productos relacionados, que se expone en el capítulo Industria del papel y pasta de papel.
La industria del aserrado ha existido en formas sencillas desde hace siglos, aunque ha sido estas últimas décadas cuando se han producido importantes avances tecnológicos con la introducción de la electricidad, la mejora en el diseño de las sierras y, más recientemente, la automatización de la clasificación y otras operaciones. También las técnicas básicas de fabricación de contrachapado se conocen desde hace muchos siglos, aunque el término contrachapado no vino a ser de uso común hasta el decenio de 1920 y su fabricación no adquirió importancia comercial hasta este siglo. Las industrias de fabricación de tableros manufacturados, incluidos los tableros de partículas, los de obleas, lo de hebras orientadas, los tableros aislantes, los de fibras de densidad media y los tableros duros, son todas ellas relativamente nuevas y sólo comenzaron a ser importantes desde el punto de vista comercial después de la segunda Guerra Mundial.

miércoles, 29 de octubre de 2008

Síntomas respiratorios de los trabajadores de las instalaciones de confinamiento de ganado

Los riesgos respiratorios generales de las instalaciones de confinamiento de animales son similares, independientemente de la especie de ganado de que se trate. Sin embargo, los confinamientos de porcino se asocian con un porcentaje mayor de efectos adversos para la salud (25 a 70 % de los trabajadores activos), con síntomas más graves que los producidos en confinamientos de aves de corral o de vacuno (Rylander y cols. 1989). Los excrementos de los corrales suelen manejarse en forma sólida, y en este caso el amoníaco suele ser el principal problema gaseoso; no hay ácido sulfhídrico.
Se ha observado que los síntomas respiratorios crónicos o subagudos que con más frecuencia comunican los trabajadores de confinamientos se dan en los confinamientos de porcino. Los estudios realizados con trabajadores de confinamientos de cerdos han revelado que aproximadamente el 75 % padece síntomas agudos adversos del tracto respiratorio superior. Estos síntomas pueden ser clasificados en tres grupos:
1. inflamación aguda o crónica de las vías respiratorias (manifestadas como bronquitis)
2. constricción adquirida (no alérgica) de las vías respiratorias
(asma)
3. enfermedad febril tardía autolimitada con síntomas generalizados [síndrome tóxico por polvo orgánico (STPO)].


Los síntomas que sugieren la presencia de una inflamación crónica del sistema respiratorio superior son comunes; se observan en el 70 % aproximadamente de los trabajadores de explotaciones de porcino. Los más frecuentes son opresión en el tórax, tos, sibiliancias y exceso de producción de esputo.
En aproximadamente el 5 % de los trabajadores, los síntomas aparecen con sólo unas semanas de trabajo en las instalaciones. Los síntomas consisten en opresión torácica, sibilancias y dificultad para respirar. Habitualmente estos trabajadores se ven tan afectados que tienen que buscar trabajo en otro sitio. No hay datos suficientes para indicar si esta reacción es una hipersensibilidad alérgica o una hipersensibilidad no alérgica al polvo y al gas. Lo más habitual es que los síntomas de bronquitis y asma aparezcan tras 5 años de exposición.
Aproximadamente el 30 % de los trabajadores experimentan de modo ocasional episodios de síntomas tardíos. Entre 4 y 6 horas después de trabajar en la instalación presentan una especie de gripe que se manifiesta por fiebre, cefalea, malestar, dolores musculares generalizados y dolor precordial. Suelen recuperarse de estos síntomas en 24 a 72 horas. Este síndrome se conoce como STPO.

Ciertamente, la posibilidad de que se produzca una lesión pulmonar crónica parece real entre estos trabajadores. Sin embargo, hasta la fecha no ha sido documentada. Se recomienda que se sigan ciertos procedimientos para impedir la exposición crónica y aguda a materiales peligrosos en explotaciones porcinas. En la Tabla 70.11 se resumen las afecciones médicas que se observan en trabajadores de estas explotaciones.

lunes, 27 de octubre de 2008

Ruido

Se han medido niveles de ruido de 103 dBA en instalaciones de confinamiento de animales; esto supera el TLV, y constituye un riesgo de sordera inducida por el ruido (Donham, Yeggy y Dauge 1988).

sábado, 25 de octubre de 2008

Conclusión del Transporte de la madera

Las operaciones de carga y descarga, que a veces deben realizarse varias veces durante el recorrido de la madera desde el bosque hasta el lugar donde se utilizará, suelen ser muy peligrosas en la industria maderera. Aunque estén totalmente mecanizadas, es necesario a veces que los trabajadores vayan a pie y que utilicen herramientas de mano, lo cual entraña riesgos. Algunos de los más grandes operadores y contratistas, conocedores de ellos, someten sus equipos a un mantenimiento adecuado y proporcionan a sus trabajadores equipos de protección personal (EPP), como calzado, guantes, cascos, gafas y protectores contra el ruido. Aun así, se precisan supervisores avezados y diligentes que garanticen el cumplimiento de las medidas de seguridad. Es ésta una cuestión problemática en operaciones pequeñas, sobre todo en los países en desarrollo. (Como ejemplo, véase la Figura 68.11, en la que aparecen trabajadores cargando troncos en Nigeria sin ningún tipo de equipos de protección personal.)

jueves, 23 de octubre de 2008

Transporte ferroviario

En Norteamérica y en los trópicos, el transporte ferroviario, al igual que el transporte acuático, está dejando paso al transporte por carretera. En cambio, sigue siendo muy importante en países como Canadá, Finlandia, Rusia y China, donde hay buenas redes ferroviarias con áreas intermedias de carga adecuadas. En algunas operaciones a gran escala, pueden utilizarse ferrocarriles temporales de vía estrecha. La madera se transporta en coches de mercancías estándar o en vagones especialmente fabricados para cargar madera. En algunas estaciones pueden utilizarse grandes grúas fijas para las operaciones de carga y descarga, pero, por lo general, se emplean los métodos de carga citados.

martes, 21 de octubre de 2008

Proceso de sacrificio

Los animales son conducidos en un redil al matadero (véase la Figura 67.2). Deben ser aturdidos antes de su sangrado, salvo que sean sacrificados de acuerdo con los ritos judío o musulmán. Normalmente, se les golpea para dejarles inconscientes con una pistola con pernos o con una de aire comprimido que introduce una punta en la cabeza (la médula oblongata). Tras el proceso de aturdimiento o “golpeo”, una de las patas traseras del animal es bloqueada por una cadena enganchada a una cinta de transporte elevada que lo traslada a la siguiente sala, donde se le sangra mediante el corte de las arterias yugulares en el cuello con un cuchillo afilado. A continuación se procede al sangrado, cuyo producto resultante se filtra a través de tuberías para su tratamiento en salas inferiores.


La piel se retira mediante una serie de cortes a cuchillo (en las grandes instalaciones se utilizan al efecto nuevos cuchillos de aire comprimido) y el animal queda suspendido de las dos patas traseras en el sistema elevado de transporte. En algunas opera- ciones con ganado porcino, la piel no se elimina en esta fase. Por el contrario, se suprime el pelo pasando la res a través de depósitos de agua a 58 °C y, con posterioridad, por una máquina que lo elimina de la piel. El pelo restante se retira mediante chamuscado y, finalmente, rasurado.


Después se cortan las patas delanteras y se extraen las vísceras (intestinos). Se corta la cabeza y se separa del cuerpo, que se divide por la mitad verticalmente a lo largo de la columna vertebral. Para este trabajo suelen emplearse sierras de banda hidráulicas. Una vez dividida la res, se enjuaga en agua caliente y puede someterse a vacuovaporización o tratarse con un nuevo proceso de pasteurización de reciente introducción en algunos países.
Los inspectores de sanidad de la Administración suelen supervisar la decapitación, la extracción de las vísceras, la división de la res en canal y el lavado final.
Después de estas operaciones, la canal, aún colgada del sistema elevado de transporte, se traslada a una cámara frigorífica para su refrigeración en el plazo de las 24 a 36 horas siguientes. La temperatura suele mantenerse en torno a los 2 °C, con el fin de ralentizar el crecimiento bacteriano y evitar el dete- rioro de la carne.

domingo, 19 de octubre de 2008

INDUSTRIA CARNICA

Entre las fuentes de carne sacrificadas para consumo humano figuran el ganado vacuno, el porcino y el ovino y, en algunos países, los caballos y los camellos. El tamaño y la producción de los mataderos varía de manera considerable. Excepto en el caso de empresas muy pequeñas situadas en áreas rurales, los animales se sacrifican y tratan en grandes instalaciones productivas. Estos lugares de trabajo suelen someterse a controles de seguridad alimentaria llevados a cabo por parte de la Administración local con el fin de prevenir la contaminación bacteriana que puede provocar enfermedades en los consumidores. Son ejemplos de patógenos conocidos presentes en la carne la salmonella y el Escherichia coli . En estos centros de producción cárnica el trabajo está muy especializado y casi todas las tareas se realizan en cadenas de despiece en las que la carne se desplaza en cintas y transportadores y cada trabajador efectúa una sola operación. Casi todas las labores de corte y elaboración siguen siendo desempeñadas por trabajadores. Las tareas productivas pueden exigir entre 10.000 y 20.000 cortes diarios. Por ejemplo, en algunos grandes centros de Estados Unidos, algunas actividades, como la división de la res en canal y el corte del tocino en lonjas, se han automatizado.

viernes, 17 de octubre de 2008

Accidentes en la pesca

Las tareas más peligrosas para el pescador son las relacionadas con el lanzamiento y la recogida de los aparejos de pesca. En la pesca de arrastre, por ejemplo, la red de arrastre se arroja en una secuencia de operaciones que requieren una compleja coordinación de distintos tipos de chigres (véase “Principales sectores y procesos” en el presente capítulo). Todas las operaciones se realizan a gran velocidad y el trabajo en equipo es indispensable. Al echar la red, la conexió n de las puertas de la red al cable de arrastre constituye uno de los momentos má s peligrosos, pues las puertas pesan varios cientos de kilos. Otras partes de las artes de pesca son demasiado pesadas para ser manejadas sin utilizar pescantes y chigres mientras se arroja la red (es decir, los aparejos pesados y diábolos se mueven libremente antes de ser elevados por encima de la borda).
Todo el proceso de arrojar y recoger las distintas redes se realiza con la ayuda de cables que a menudo pasan por la zona de trabajo. Los cables está n muy tensos, pues suele existir una fuerte tracción de los aparejos de pesca en direcció n contraria al avance del buque. Los pescadores corren un gran riesgo de enre- darse en los aparejos o caer en ellos y verse arrastrados fuera de borda, o de caer al agua al arrojar los aparejos. Pueden producirse lesiones en los dedos, manos y brazos, y los aparejos de gran peso pueden caer o desplazarse y lesionar pies y piernas.
La limpieza y el desangrado de los peces a menudo se realiza a mano en cubierta o en una cubierta de abrigo. Los movimientos bruscos del barco hacen que sean frecuentes las lesiones en manos y dedos por cuchillos o espinas de pescado. La pesca con línea y con sedal manual entrañ a el riesgo de herirse dedos y manos con los anzuelos. Puesto que este tipo de pesca cada vez se automatiza más, el peligro lo constituyen los haladores de línea y los chigres.
El mé todo de gestión de la pesca consistente en limitar las capturas en una zona delimitada de recursos naturales también influye en el índice de lesiones. En algunos lugares, las cuotas asignan a los buques determinados días para pescar y los pescadores creen que deben salir cualquiera que sea el tiempo.

miércoles, 15 de octubre de 2008

EFECTOS SOBRE LA SALUD Y PAUTAS PATOLOGICAS

El trabajo en la pesca y en la industria de procesamiento de pescado es muy diferente según el sexo del trabajador, pues los hombres realizan tradicionalmente los trabajos de pesca y las mujeres trabajan en el procesamiento en tierra. Se puede considerar que muchas de las personas que trabajan en buques de pesca no está n cualificadas, como los marineros, que reciben su formació n a bordo. Los navegantes (capitán, patrón y oficial de cubierta), el personal de la sala de má quinas (ingeniero, maquinista y fogonero), los operadores de radio y los cocineros tienen unos antecedentes formativos distintos. La tarea principal es pescar; otras actividades son cargar el buque, lo que se hace en mar abierto, y el procesamiento del pescado, que se efectúa en varias fases. La única exposición comú n a estos grupos tiene lugar durante su estancia a bordo del buque y es el movimiento constante, tanto mientras trabajan como cuando descansan. Hablaremos del procesamiento en tierra más adelante.

lunes, 13 de octubre de 2008

Breve descripción del proceso de la Industria de la Cerveza

El cereal utilizado como materia prima suele ser la cebada, aunque tambié n se emplea centeno, maíz, arroz y avena. En la primera etapa se maltea el cereal, bien hacié ndolo germinar, bien por medios artificiales. Este proceso transforma los carbohidratos en dextrina y maltosa, azú cares que despué s se extraen del grano sumergiéndolo en una tina de mezcla (tinaja o barril) y agitándolo en un tanque de fermentación. El licor resultante, conocido como mosto dulce, se hierve en una caldera de cobre con lú pulo, lo que le confiere el sabor amargo y ayuda a conservar la cerveza. A continuación, el lúpulo se separa del mosto y se pasa a través de refrigeradores al interior de los recipientes de fermentación, donde se añ aden las levaduras—un proceso conocido como cebado— y se lleva a cabo el proceso principal, que es la conversión del azúcar en alcohol (Vé ase el capítulo Industria farmacéutica para cuestiones de fermentación ). La cerveza se enfría entoncesesporas. Cuando se da la vuelta a la cebada para evitar que
enraícen los vá stagos o cuando se carga en el horno, los trabaja- dores pueden inhalar las esporas, lo que puede ocasionar una alveolitis alé rgica extrínseca, cuya sintomatología no se distingue del pulmó n del granjero; la exposició n de un individuo sensibili- zado va seguida de un aumento de la temperatura corporal y disnea. Tambié n se produce una disminució n de la funció n pulmonar y del factor de transferencia del monó xido de carbono.
En un estudio llevado a cabo en dos cerveceras de Portugal con polvos orgá nicos que contenían altos niveles de endotoxina se observó un predominio de los síntomas del síndrome tó xico del polvo orgá nico, que es distinto de la alveolitis o de la neumonía hipersensible, en el 18 % de los trabajadores. En un
39 % de los trabajadores se encontró irritación de la membrana mucosa (Carveilheiro y cols. 1994).
En una població n expuesta, la incidencia de la enfermedad es aproximadamente del 5 % y la exposició n continuada produce incapacidad respiratoria severa. Con la introducció n del malteado automá tico, que evita la exposició n del trabajador, esta enfermedad prá cticamente ha desaparecido.

sábado, 11 de octubre de 2008

INDUSTRIA DE LA CERVEZA

La elaboración de la cerveza es una de las industrias má s antiguas del mundo: la cerveza, en sus diferentes variedades, se bebía ya en la antigü edad y los romanos la introdujeron en todas sus colonias. Hoy en día se elabora y consume en casi todos los países, especialmente en Europa y en las á reas de dominio europeo.

jueves, 9 de octubre de 2008

Otros factores

Los riesgos má s comunes para la salud y la seguridad asociados a factores mecánicos son cortes, abrasiones y traumatismos mú ltiples, que casi siempre afectan a las manos y el rostro. Estas lesiones deben ser atendidas en el acto. Los trabajadores deben recibir cada cierto tiempo dosis de recuerdo de la vacuna del té tanos y tener siempre acceso a un equipo adecuado de primeros auxilios.
El entorno psicosocial puede poner también en peligro la salud de los trabajadores. La exposició n a esos factores puede tener las siguientes consecuencias: cambios fisioló gicos (indigestión, estreñ imiento, palpitaciones, dificultad respiratoria, hiperventilación, insomnio y ansiedad); trastornos psicoló gicos (tensión y depresión); y trastornos de la conducta (absentismo, inestabilidad, insatisfacció n).

martes, 7 de octubre de 2008

Enfermedades infecciosas

La floricultura puede exponer a los trabajadores a una serie de agentes bioló gicos. Los signos precoces de una infecció n rara vez son específicos, aunque en general está n lo suficientemente bien definidos para sospechar una enfermedad. La sintomatología y las precauciones dependen del agente, que puede ser té tanos, rabia, hepatitis, etc. Las medidas preventivas consisten en disponer de una fuente de agua potable, unas buenas instalaciones sanitarias, un botiquín de primeros auxilios y asistencia mé dica para los cortes y abrasiones.

sábado, 4 de octubre de 2008

Enfermedades infecciosas

Unas 25 zoonosis tienen importancia para los agricultores. Muchas pueden ser transmitidas directa o indirectamente por el ganado. Las condiciones de hacinamiento que suelen darse en los sistemas de confinamiento ofrecen un gran potencial para la transmisión de zoonosis del ganado al hombre. Los confinamientos de porcino implican un riesgo de transmisión a los trabajadores de la gripe porcina, leptospirosis, Streptococcus suis y salmonela, por ejemplo. Los confinamientos de aves de corral implican el riesgo de transmitir ornitosis, histoplasmosis, el virus de la enfermedad de New Castle y salmonela. Los confinamientos de ganado bovino pueden transmitir la fiebre Q , Trichophyton verrucosum (tiña de los animales) y leptospirosis.
También diversas sustancias biológicas y antibióticos han sido reconocidos como peligros potenciales para la salud. Las vacunas inyectables y ciertas sustancias biológicas se emplean habitualmente en programas médicos de prevención en veterinaria que se aplican en confinamientos de animales. Se ha observado que la inoculación accidental de vacunas de Brucella y de bacterias de Escherichia coli produce enfermedades en el hombre.
Se usan antibióticos por vía parenteral e incorporados al alimento de los animales. Como se sabe que el alimento es componente habitual del polvo presente en las instalaciones de confinamiento de animales, se supone que los antibióticos están también presentes en el aire. Por eso, la hipersensibilidad a los antibióticos y las infecciones resistentes a ellos implican peligros potenciales para los trabajadores.