viernes, 28 de septiembre de 2007

Características regionales del sector y de los trabajadores: Contaminación del aire y del agua

Los excrementos de los animales tienen posibles consecuencias ambientales sobre la contaminación del agua y del aire. Según las cifras anuales sobre excrementos en Estados Unidos que se ofrecen en la Tabla 70.3, en 1994 las principales razas ganaderas fueron responsables de un total de 14.300 millones de toneladas de heces y orina en todo el mundo. De este total, al ganado bovino (leche y carne) le correspondió 87 %; al porcino, el 9 %; y a los pollos y pavos, el 3 % (Meadows 1995). Debido a su elevado factor de excreción anual de 9,76 toneladas de heces y orina por animal, el ganado bovino fue el máximo contribuyente a la emisión de excrementos en las seis regiones de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación
(FAO), desde el 82 % en Europa y en Asia hasta el 96 % en el Africa subsahariana.
En los Estados Unidos, los granjeros que se especializan en la cría ganadera no se dedican a la agricultura, como ha sido la práctica histórica. El resultado es que los excrementos del ganado ya no se aplican sistemáticamente a las cosechas como abono. Otro problema de la moderna cría de ganado es la elevada concentración de animales en pequeñas zonas, como los edificios de confinamiento o establos. Las grandes explotaciones pueden tener encerrados entre 50.000 y 100.000 vacas, 10.000 cerdos o 400.000 pollos en una zona. Además, tienden a agrupar las plantas de transformación, para acortar las distancia de transporte.
De la concentración de operaciones emanan diversos problemas ambientales, en particular los efectos sobre la salud de los vertidos a acuíferos, las filtraciones y aflujos crónicos y la contaminación atmosférica. El paso de nitritos al agua y los escapes procedentes de los campos y los establos contribuyen de forma fundamental a la contaminación del agua. El uso masivo de estabulaciones hace que el estiércol animal se concentre y aumenta el riesgo de que se contaminen las aguas freáticas. Habitualmente, los desechos de las explotaciones vacunas y porcinas se recogen en estanques, grandes excavaciones poco profundas hechas en el suelo. El diseño de los estanques depende de la sedimentación de los elementos sólidos en el fondo, donde son digeridos de modo anaerobio, y los líquidos sobrantes se controlan esparciéndolos por los terrenos colindantes cuando rebosan (Meadows 1995).
La biodegradación de los excrementos de los animales emite, además, gases olorosos que contienen hasta 60 compuestos. Entre éstos se encuentran el amoníaco y aminas, sulfuros, ácidos grasos volátiles, alcoholes, aldehídos, mercaptanos, ésteres y carbonilos (Sweeten 1995). El olor de los concentrados de excrementos de las explotaciones puede producir náuseas, cefaleas, problemas respiratorios, trastornos del sueño, pérdida de apetito
e irritación de ojos, oídos y garganta.
Se conocen peor los efectos adversos de los excrementos del ganado sobre el calentamiento global y la contaminación atmos- férica. Su contribución al calentamiento global depende de su generación de los gases que provocan el efecto invernadero, dióxido de carbono y metano. El estiércol del ganado puede contribuir a la contaminación por nitrógeno, debido al amoníaco liberado por los estanques de desechos a la atmósfera. El nitrógeno atmosférico vuelve a entrar en el ciclo hidrológico mediante la lluvia y pasa al agua de arroyos, ríos, lagos y costas. El nitrógeno del agua contribuye a que aumenten las algas que reducen el oxígeno disponible para los peces.
Hay dos formas de modificar la producción de ganado que ofrecen soluciones a algunos de los problemas de la contaminación. Se trata de confinar menos a los animales y de mejorar los sistemas de tratamiento de los desechos.

jueves, 27 de septiembre de 2007

Riesgos potenciales y efectos sobre la salud (I)

La elaboració n del café comienza con la apertura de las bolsas con un pequeñ o cuchillo y el vertido de los granos en un recipiente para proceder a su limpieza. La zona de trabajo es ruidosa y gran cantidad de material residual en forma de partículas que se libera de las má quinas de limpieza permanece en suspensión.
El tostado expone a los trabajadores a riesgos de quemaduras y molestias producidas por el calor. La mezcla de los granos, o combinación, se realiza automá ticamente, así como la molienda, en á reas en que la iluminació n puede ser insuficiente debido al polvo de café en suspensió n. La suciedad se acumula, los niveles de ruido pueden ser altos y la mecanizació n requiere trabajar a gran alta velocidad.

Después de la molienda, se llenan bolsas de distintos materiales y tamaños, y se embalan normalmente en cajas de cartón. Cuando estas operaciones se realizan manualmente, exigen movimientos repetitivos de manos y brazos a gran velocidad. Las cajas de cartó n se transportan a las zonas de almacenamiento y despué s a su destino final.
El fuerte olor característico de la industria del café puede molestar a los trabajadores dentro de las fá bricas, así como a las personas que viven en los alrededores. La importancia de este problema como riesgo potencial para la salud todavía no se ha aclarado. El olor del café se debe a una mezcla de varios productos, que se está investigando para identificar los efectos individuales de cada sustancia química. Se sabe que algunos componentes del polvo de café y algunas de las sustancias que producen olores son alé rgenos.
Los riesgos potenciales en las fá bricas de café instantá neo son similares a los existentes en la producción de café normal, pero a ellos se suman los derivados del vapor caliente y la explosión de las calderas. En la extracción de la cafeína, aun cuando se realiza automá ticamente, existe un riesgo de exposición a los disolventes.

martes, 25 de septiembre de 2007

Métodos de pesca y tipos de buques de pesca: Pesca a la línea en buques pequeños

La pesca de bajura en pequeñ os buques todavía constituye una actividad importante en muchos países y ha registrado un considerable desarrollo. Las barcas de madera con motores fuera o dentro de borda han sido sustituidas en gran parte por buques de cubierta o media cubierta, en su mayoría de fibra de vidrio y con diseñ o de buques de alta velocidad que pueden llegar a caladeros a media distancia de la costa. Generalmente, la longitud de estos buques oscila entre 8 y 15 m. Equipados con motores de 250 a 400 caballos de potencia, pueden alcanzar una velocidad crucero de hasta 24 nudos. Normalmente, la cabina tiene dos camarotes, un pasillo y un retrete. Algunas de estas embarcaciones está n equipadas con carretes de pesca de accionamiento informatizado.
El carrete suelta la línea y detecta cuando un lastre toca fondo, sitú a los anzuelos a la distancia deseada y efectú a acciones de tira y afloja. Tambié n detecta si pica un pez y, en tal caso, recoge la captura a la superficie.

lunes, 24 de septiembre de 2007

Características regionales del sector y de los trabajadores: Cuestiones ambientales y de salud pública

Los riesgos laborales de la ganadería pueden dar lugar a lesiones, asma o zoonosis. Además, la cría de ganado suscita diversas cuestiones ambientales y de salud pública. Un aspecto es el efecto de los excrementos de los animales sobre el entorno. Otros son la pérdida de diversidad biológica, los riesgos asociados con la importación de animales y de productos y la seguridad de los alimentos.

domingo, 23 de septiembre de 2007

Métodos de pesca y tipos de buques de pesca: Pesca con redes de deriva

Las redes de deriva atrapan a los peces por las branquias. En los buques pesqueros con superestructura en popa y zona de trabajo en el centro del buque, se sueltan varias redes de deriva, unidas una a otra, por el costado. En el extremo libre de las redes se ata una boya y en la parte superior una serie de flotadores. El buque mantiene las redes extendidas. Actualmente, este tipo de pesca ha sido sustituido en muchos países por pesca de cerco y arrastreros de fondo a la pareja.

viernes, 21 de septiembre de 2007

Enfermedades por traumas acumulados (I)

En muchos de los centros de elaboración de carnes, pescados, aves y otros alimentos, se realizan tareas enérgicas y muy repetitivas. La propia naturaleza de los productos obliga con frecuencia a utilizar trabajadores para su manipulación al inspeccionar o cargar artículos frágiles en los embalajes o durante el proceso de ampliación de la producción antes de que se adquieran e instalen equipos de gran volumen. Además, el manejo de cajas para su traslado puede provocar lesiones de espalda. Deben vigilarse las tareas que exigen la adopción de posturas extremas, las fuerzas de gran intensidad y los niveles de repetición elevados. Las combinaciones de varios de estos factores agravan el problema. Es deseable una detección y un tratamiento precoz de los trabajadores afectados. El diseño ergonómico de los equipos y otras transformaciones analizadas en artículos específicos incluidos en el presente capítulo reducen la incidencia de estos riesgos.
Los refrigerantes como el amoníaco anhidro, el cloruro de metilo y otros hidrocarburos alifáticos halogenados utilizados en procesos de congelación y en cámaras frigoríficas plantean riesgos de intoxicación y quemaduras químicas. Es importante llevar a cabo una planificación de urgencias, además de la habitual relativa a incendios. La formación de los trabajadores en lo que respecta a procedimientos de evacuación también es nece- saria. En la evacuación de ciertas áreas de las instalaciones puede requerirse una protección respiratoria como la utilizada en situaciones de evacuación. En el caso de algunos productos químicos, se utilizan sensores en los edificios para que los traba- jadores sean advertidos desde un primer momento mediante un sistema de alarma central que señala la necesidad de evacuar el lugar. Las reacciones de los trabajadores a los aumentos del nivel de amoníaco deben considerarse detenidamente, y los que resulten afectados deben ser evacuados y tratados. Las fugas de esta sustancia requieren una atención estricta y una vigilancia continua. La evacuación puede ser imprescindible si los niveles comienzan a elevarse y antes de que se alcancen niveles peligrosos. Debe seleccionarse un lugar común de reunión de forma que los evacuados no corran el peligro de situarse en la misma dirección de la fuga de refrigerante. Ha de emplearse ropa de protección contra sustancias químicas para aproximarse con determinación al lugar de la fuga y contener el vertido. El amoníaco anhidro y otros refrigerantes utilizados con menor frecuencia, como el propano, el butano, el etano y el etileno, son asimismo inflamables y explosivos. Las fugas en los tubos de conducción suelen deberse a un mantenimiento inadecuado y pueden evitarse prestando la debida atención. Deben adoptarse las medidas oportunas para prevenir las explosiones y luchar contra los incendios.
Los plaguicidas, los productos fumigantes y otros materiales peligrosos deben someterse a un control estricto y utilizarse únicamente de acuerdo con las directrices de los fabricantes. Los plaguicidas organosfosfatados sólo deben emplearse si son objeto de un seguimiento biológico que asegure el control de la exposición.

jueves, 20 de septiembre de 2007

INDUSTRIA DEL CAFE



Descripción general
El café como bebida se introdujo en Europa en el siglo XVI. Desde Alemania se extendió en el siglo siguiente a todo el continente europeo, especialmente Francia y Holanda. Después se expandió por el resto del mundo.
Dado que el café no mantiene sus características de sabor y olor durante mucho tiempo despué s de tostado y molido, en las zonas en que se consume café se han implantado establecimientos industriales para tostar y moler café . Son plantas de tamañ o pequeñ o o mediano, aunque existen grandes factorías, principalmente para producir café normal e instantáneo
(soluble).
Es difícil estimar el nú mero de trabajadores de la industria del café . Algunas de las plantas más pequeñas no llevan registros y las cifras no son muy fiables. Considerando un consumo total de unos 100 millones de bolsas de 60 kg de café en el añ o 1995, el volumen de negocios del café en el mundo representa unos 50 millones de dó lares. La Tabla 65.1 muestra una lista de los principales países importadores de café , lo que da una idea del consumo actual en el mundo.
La fabricació n del café es un proceso relativamente sencillo, que comprende la limpieza, el tostado, la molienda y el empaquetado, como se muestra en la Figura 65.5. Sin embargo, la tecnología moderna ha puesto en marcha procesos complejos con mayor velocidad de producció n y necesidad de contar con laboratorios para pruebas de control de calidad del producto.
Los granos de café llegan a las fá bricas en bolsas de 60 kg, que se descargan mecá nica o manualmente. En el ú ltimo caso, dos trabajadores sostienen una bolsa y la colocan en la cabeza de otro trabajador, que traslada la bolsa al almacé n. Aun cuando el traslado se realice en cintas transportadoras, se requiere algo de esfuerzo físico con alto consumo energético.
El uso de café instantá neo no deja de aumentar y representa aproximadamente el 20 % del consumo mundial. El café instantáneo se obtiene mediante un proceso complejo, en el que chorros de aire caliente pasan sobre los extractos de café , viniendo despué s la evaporación, el enfriamiento y la liofiliza ción, con detalles variables de una fá brica a otra. En la fabricación del café descafeinado, que representa alrededor de un 10 % del consumo en Estados Unidos y en Europa, algunas fá bricas utilizan aú n disolventes clorados (como el cloruro de metileno), que se elimina mediante un chorro de vapor de agua.


miércoles, 19 de septiembre de 2007

Características regionales del sector y de los trabajadores: América del Norte

Aunque la agricultura es una actividad económica importante en Canadá y en Estados Unidos, la proporción de la población que se dedica a ella es inferior al 2,5 %. Desde el decenio de 1950, la agricultura se ha hecho más intensiva, de forma que las explotaciones son menos, pero más grandes. El ganado y los productos derivados de él constituyen una proporción fundamental de la dieta de la población, contribuyendo con un 40 % al total de energía procedente de los alimentos. En esta región, el sector ganadero ha sido muy dinámico. Los animales introducidos han sido cruzados con razas autóctonas para formar otras nuevas. La demanda por parte de los consumidores de carnes más magras y huevos con menos colesterol influye actualmente sobre la política de cría. A finales del siglo XIX se utilizaban mucho los caballos, pero su número ha disminuido debido a la mecanización. En la actualidad se emplean en actividades deportivas (hipódromos) y de ocio. Estados Unidos ha importado unas 700 especies de insectos para controlar más de 50 plagas. La acuicultura está creciendo en esta región, y en 1992 constituyó el 3,7 % de la producción mundial (FAO 1995; Scherf 1995).

martes, 18 de septiembre de 2007

Plaguicidas en las Plantaciones


El uso de productos fitosanitarios tó xicos constituye un grave problema, sobre todo cuando se hace un uso intensivo de plaguicidas, entre ellos herbicidas, fungicidas e insecticidas. Los trabajadores pueden verse expuestos a esas sustancias peligrosas durante la producció n agrícola, el embalaje, el almacenamiento, el transporte, la venta minorista o la aplicación (normalmente manual o aérea), el reciclado y la evacuación de plaguicidas. El riesgo de la exposició n a plaguicidas puede verse agravado por el analfabetismo, un etiquetado insuficiente o erróneo, las fugas de los recipientes, la ausencia o uso incorrecto de equipos protectores, las reformulaciones peligrosas, la ignorancia del peligro, el imcumplimiento de las normas o la falta de supervisión o formación técnica. Los trabajadores que aplican los plaguicidas deben utilizar prendas adecuadas y protección respiratoria, si bien ésta es una conducta muy difícil de conseguir en zonas tropicales en donde los equipos de protección aumentan el estrés por calor

lunes, 17 de septiembre de 2007

Riesgos en la industria Alimentaria para la salud

Las infecciones y las enfermedades infecciosas o parasitarias propagadas por animales o por los productos de desecho de éstos utilizados en la fabricación son problemas profesionales comunes en la industria alimentaria. Entre estas zoonosis se encuentran el ántrax, la brucelosis, la leptospirosis, la tularemia, la tubercu- losis bovina, el muermo, la erisipela, la fiebre Q , la fiebre aftosa, la hidrofobia, etc. Algunos manipuladores de alimentos pueden contraer una amplia gama de infecciones de la piel, incluido el ántrax, la actinomicosis y la erisipela. Ciertos frutos secos están plagadas de ácaros que pueden afectar a los trabajadores en las operaciones de clasificación.
Aparte de la vacunación profiláctica específica contra las enfermedades infecciosas, la utilización de guantes adecuados, una higiene personal apropiada y unas instalaciones sanitarias que permitan adoptar tales precauciones (que constituyen un requisito previo de toda industria alimentaria como protección del producto) son las medidas preventivas más importantes. Unos buenos servicios de lavado, que incluyan duchas, y la equipación con ropa protectora apropiada son esenciales. Es igual- mente importante disponer de una asistencia médica eficaz, sobre todo en el tratamiento de lesiones menores.
Las dermatitis de contacto y las alergias de la piel o del sistema respiratorio provocadas por productos orgánicos, animales o vegetales, también son habituales. La dermatitis puede deberse a la acción de productos irritantes como ácidos, álcalis, detergentes y agua utilizados en las tareas de limpieza; la fricción producida en las operaciones de recogida y embalaje de fruta; y la manipulación del azúcar, muy utilizado en la elaboración de ciertos alimentos. La sensibilización secundaria se deriva de la manipulación de numerosas frutas y verduras. Asimismo, los polvos orgánicos generados por los cereales o la harina pueden causar enfermedades respiratorias (p. ej., el “asma del panadero”) y deben controlarse. Con demasiada frecuencia, en la industria alimentaria se consideran los materiales utilizados como meros ingredientes, y no como productos químicos que pueden afectar a la salud cuando los trabajadores se exponen a fuerzas o cantidades industriales de ingredientes “normales” empleados en la cocina doméstica.

domingo, 16 de septiembre de 2007

Incendios en las Plantaciones

La electricidad, las hogueras o los cigarrillos pueden convertirse en la fuente de ignición de explosiones de combustible o polvo orgá nico. Los combustibles —queroseno, gasolina o gasó leo— pueden causar incendios o explosiones cuando se manipulan o almacenan incorrectamente. Los residuos grasientos y combustibles entrañ an el peligro de incendio en los talleres. Los combustibles deben mantenerse alejados de cualquier fuente de ignición. En presencia de materiales inflamables o explosivos deben utilizarse siempre dispositivos y aparatos elé ctricos antideflagrantes. En los circuitos elé ctricos han de instalarse fusibles o dispositivos de desconexió n elé ctrica.

sábado, 15 de septiembre de 2007

Accidentes mortales en el trabajo forestal (II)

En el trabajo forestal pueden resultar heridas casi todas las partes del cuerpo, pero las lesiones suelen concentrarse en piernas, pies, espalda y manos, aproximadamente por ese orden. Los cortes y las heridas abiertas son el tipo de lesión más común en el trabajo con motosierras, mientras que en la saca por arrastre predominan las contusiones, aunque también se producen fracturas y dislocaciones.
Dos situaciones en las que se multiplica el ya alto riesgo de sufrir accidentes graves en el aprovechamiento forestal son los árboles “suspendidos” y los árboles derribados por el viento. La fuerza del viento somete a tensión los pies maderables, con lo que se precisan técnicas de corte adaptadas a esa función (véase FAO/CEPE/OIT 1996a; FAO/OIT 1980; y OIT 1998). Los árboles suspendidos son los que, una vez cortados por el pie, no han caído al suelo porque la copa se ha enredado con otros árboles. Son muy peligrosos, hasta el punto de que en algunos países se dice de ellos que “van dejando viudas” debido al gran número de fallecimientos que causan. Para bajar estos árboles con seguridad es preciso ayudarse de utillajes como cabrestantes y ganchos giratorios. En ningún caso debe permitirse el apeo de otros árboles sobre uno suspendido con la idea de tirarlo. Es una práctica conocida en algunos países como “arrastre”, y resulta muy peligrosa.
Los riesgos de accidente están en función no sólo de la tecnología que se utilice y del grado de exposición que comporte el trabajo, sino también de otros factores. En casi todos los casos de los que se disponen datos, existe una diferencia muy significativa entre los segmentos de trabajadores. Los profesionales del trabajo forestal a tiempo completo empleados directamente por una empresa forestal se ven mucho menos afectados que los granjeros, los autónomos o los contratistas. En Austria, los gran- jeros que explotan los bosques estacionalmente sufren el doble de accidentes por millón de metros cúbicos cortados que los trabajadores profesionales (Sozialversicherung der Bauern 1990), mientras que en Suecia llegan a sufrir el cuádruple. En Suiza, los trabajadores empleados en los bosques públicos sólo sufren la mitad de accidentes que los empleados por empresas contratistas, sobre todo en el caso de la contratación de temporeros y de inmigrantes (Wettmann 1992).
La mayor mecanización del aprovechamiento forestal ha tenido consecuencias muy positivas para la seguridad laboral. Los operarios de las máquinas están bien protegidos en cabinas con defensas y los riesgos de accidente han disminuido de manera notable; sufren menos del 15 % de los accidentes que afectan a los operarios de motosierras para obtener la misma cantidad de madera. En Suecia, estos trabajadores sufren una cuarta parte de los accidentes que afectan a los operarios profe- sionales de motosierras.

viernes, 14 de septiembre de 2007

Métodos de pesca y tipos de buques de pesca: Pesca de palangre



La pesca de palangre consiste en arrojar una línea larga a la que se han fijado varios fragmentos de línea con cebos cada 1 m ó 2 m. Transcurrido un tiempo determinado, se recoge la línea y se retiran los peces capturados de los anzuelos. Este método de pesca ha sido utilizado – y aún lo es – por buques de pesca de pequeñ o tamañ o sin abrigo en la cubierta (vé anse las Figuras 66.6 y 66.7). Por lo general, los cebos se colocan en tierra y se almacenan en tubos. El buque deja ir la línea por la popa y la recoge por estribor con un motor hidrá ulico.
Los buques palangreros modernos, equipados con línea automá tica, tienen una cubierta de abrigo, una apertura lateral para la recogida y una apertura en la roda para soltar la línea. Ambas aperturas pueden cerrarse hermé ticamente y está n situadas a un á ngulo que limita la inundación a una parte de la cubierta de trabajo en caso de que rompa una ola. Una vez recogida la línea, é sta pasa por un mecanismo automá tico en que se limpian los anzuelos y se cuelgan nuevos cebos, todo ello en una sola operació n justo antes de volver a soltarla. Los palangreros pueden tener una longitud de 60 m, pudiendo alojar entre 20 y 40 tripulantes. El sistema de línea automá tica cuenta con un máximo de 40.000-50.000 anzuelos en una línea de hasta 60 Km de longitud. La línea se suelta a una velocidad de 7-8 nudos y el recogedor de línea tiene una potencia de unas 5 t. La zona de procesamiento se encuentra en el entrepuente, que está equipado con correas transportadoras, contenedores y mesas para la limpieza y el despiece manuales. En algunos casos, los buques está n equipados para congelar el pescado.


jueves, 13 de septiembre de 2007

Prevención de riesgos en el Envasado en la industria de Bebidas (VI)

Los avances tecnoló gicos han propiciado que se disponga de mejores materiales de absorció n de ruido para aislar o silenciar los motores y engranajes de la mayoría de los equipos. Sin embargo, dada la función y el tamaño de la maquinaria de llenado, los niveles de ruido suelen superar los 90 dBA. Los trabajadores que esté n expuestos a este nivel de ruido durante una media ponderada de 8 horas deben contar con protecció n. Un buen programa de protecció n del oído debe incluir la investigació n de formas má s adecuadas de control del ruido; la formación de los trabajadores sobre los efectos relacionados con la salud; la protección personal frente al ruido; y la formación sobre có mo utilizar los mecanismos protectores de oídos, que deben ser obligatorios en las á reas de alto nivel de ruido. Periódicamente conviene explorar el oído de los trabajadores.
Las elevadoras de horquilla se manejan en la planta de embotellado y es imperativo que su uso sea seguro. Además de demostrar su aptitud como conductor, los posibles operarios deben comprender los principios de seguridad de las elevadoras. Se suelen expedir licencias que acreditan un nivel mínimo de competencia. Los programas sobre seguridad de las elevadoras deben incluir un proceso de inspecció n previo al uso con el fin de comprobar los vehículos y garantizar que todo el equipo de seguridad esté en su sitio y funcione. Cualquier deficiencia debe ser inmediatamente notificada y corregida. Las elevadoras de gas o de petró leo líquido (PL) generan monó xido de carbono como subproducto de la combustió n. Estas emisiones se pueden minimizar manteniendo los motores de las elevadoras con arreglo a las especificaciones de los fabricantes.
Es normal usar un equipo de protecció n personal (EPP) en la instalació n de embotellado. Los trabajadores de la sala de llenado llevan protectores de ojos y oídos. El personal de desinfección lleva protección en cara, manos y pies adecuada para las sustancias químicas a que están expuestos. Aunque se recomienda el calzado antideslizante en la fábrica, los encargados de mantenimiento deben llevar también la protección añadida de calzado con punta de acero. La clave de un buen programa de EPP es identificar y evaluar los riesgos potenciales asociados a cada tarea y determinar si esos riesgos se pueden eliminar con modificaciones té cnicas. Si no es así, se debe elegir un EPP adecuado para evitar el riesgo específico y tenerlo a mano.
El papel de los directivos es crítico en la identificación de los riesgos y en el desarrollo de unas prá cticas y procedimientos tendentes a reducirlos al mínimo. Una vez desarrollados, se deben comunicar a los trabajadores para que puedan realizar su trabajo de forma segura.
Dado que la tecnología de las fábricas sigue avanzando proporcionando mejor equipo, nuevos sistemas de protección de la maquinaria y nuevos equipos de protección los embotelladores de bebidas refrescantes dispondrá n aú n de más medios para mantener la seguridad en los puestos de trabajo.

miércoles, 12 de septiembre de 2007

Riesgos y su prevención en la Industria Alimentaria (IV)

Es esencial un estricto control de la higiene de los productos en todas las fases de la elaboración de los alimentos, incluidos los mataderos. Las prácticas de higiene industrial y personal son sumamente importantes en la protección contra la infección y la contaminación de las materias tratadas. Los locales y los equipos deben diseñarse para promover la higiene personal mediante la disposición de instalaciones sanitarias y lavabos adecuados y convenientemente situados, de duchas en caso necesario, de ropas protectoras adecuadas y de servicios de lavandería de las mismas, así como de cremas y lociones protectoras cuando resulte pertinente.
Además, es imprescindible garantizar una higiene estricta de los equipos en todas las fases de la elaboración de los alimentos. En el funcionamiento ordinario de la mayoría de las instala- ciones, las normas de seguridad son eficaces para controlar los riesgos vinculados a la maquinaria. En el ciclo de higiene, los equipos deben abrirse, deben desmontarse los dispositivos de protección e inabilitarse los sistemas de enclavamiento. Resulta frustrante que el diseño de las máquinas responda a su funciona- miento y que su limpieza ocupe por lo común un plano secun- dario, como lo demuestra la enorme proporción de lesiones graves producidas en esta fase del proceso. Sus causas más comunes son los puntos de atenazado para la introducción de material, el agua caliente, los productos químicos y las salpica- duras de ácidos o de bases, así como la limpieza de equipos en movimiento. Las mangas de aire comprimido que transportan agua caliente también constituyen un peligro. La falta de procedimientos específicos de cada equipo, la formación deficiente y el escaso nivel de experiencia de los trabajadores novatos que son obligados a realizar tareas de limpieza pueden agravar el problema. El riesgo aumenta cuando la maquinaria que debe limpiarse se sitúa en áreas de acceso difícil. Es esencial que exista un programa eficaz de procedimientos de bloqueo y carteles de advertencia. Una buena práctica actual que facilita la superación de este problema es el diseño de instalaciones para la limpieza en el lugar de ubicación del equipo. Algunas máquinas se diseñan para su autolimpieza mediante la utilización de esferas pulverizadoras a alta presión y de sistemas de autolavado, pero es muy frecuente que deba recurrirse a los servicios de trabajadores que se ocupan de puntos problemáticos. Por ejemplo, en las industrias de la carne y las aves, todas las opera- ciones de limpieza son manuales.

martes, 11 de septiembre de 2007

Características regionales del sector y de los trabajadores: Medio Oriente

En la actualidad, el 31 % de la población de Medio Oriente se dedica a la agricultura. Debido a la escasez de lluvias en la región, el único uso agrícola del 62 % de estos terrenos son los pastos. La mayor parte de las especies de ganado fueron domesticadas en esta región (cabras, ovejas, cerdos y ganado bovino), en la confluencia de los ríos Tigris y Eufrates. Más tarde, en el norte de Africa, fueron domesticados los búfalos de agua, los dromedarios y los asnos. Hoy en día persisten algunos sistemas de cría de ganado que hubo en la antigüedad. Se trata de sistemas de subsistencia que se practican en las sociedad tribales árabes y que se basan en la trashumancia a largas distancias en busca de comida y agua, con el cambio de estación. Se emplean sistema de agricultura intensiva en los países más desarrollados.

lunes, 10 de septiembre de 2007

Problemas ambientales y de salud pública (II)

Desde finales del decenio de 1930, la ayuda federal de Estados Unidos ha canalizado millones de dólares hacia la investigación sobre la fauna, la conservación, la gestión y la educación de los cazadores. Uno de los resultados de estos esfuerzos es que las poblaciones de animales silvestres utilizadas activamente por cazadores y tramperos gozan ahora de una relativa buena salud y son capaces de sostener los usos para consumo. La experiencia de la ayuda federal indica que cuando la fauna cuenta con el respaldo de una comunidad dispuesta a pagar los costes de investigación y gestión, el futuro de esas especies es relativamente brillante. Por desgracia, no ocurre así en el caso de numerosos ecosistemas y especies silvestres de todo el mundo. A medida que nos aproximamos a un nuevo siglo, la alteración de los hábitat y la extinción de las especies se nos aparecen como problemas de conservación muy evidentes.
El otro desafío pendiente es la controversia sobre los derechos de los animales. ¿Son la caza normal y la caza con cepo, sobre todo con fines recreativos o no de subsistencia, activi- dades socialmente aceptables en un mundo que entrará en el siglo XXI con una población creciente y recursos cada vez más limitados? Este debate social se ha intensificado en las últimas décadas. Un aspecto positivo del diálogo es que quienes participan en estas actividades han tenido que esforzarse por mejorar la fundamentación de sus posturas y por mantener grados elevados de rendimiento de sus actividades de caza normal y caza con cepo. Las actividades que ofendían la sensibilidad del público en general, como la matanza a palos de las crías de foca en la costa de Terranova, se han suprimido en ocasiones, en este caso concreto con un enorme coste social y económico para los habitantes de Terranova, que han participado durante siglos en tales actividades. La amenaza reciente de las comunidades europeas de prohibir la importación de pieles capturadas por cepos de presa en la pata de acero ha intensificado la búsqueda de métodos prácticos y más humanitarios de matar a ciertos animales de pelo. Esa misma prohibición propuesta supone una amenaza para una forma de vida de subsistencia que ha existido durante mucho tiempo en la Norteamérica rural. (Para más detalles, véase Hercovici 1985).

domingo, 9 de septiembre de 2007

Electricidad en las Plantaciones

El uso de la electricidad en las plantaciones se limita generalmente a la transformació n de los cultivos y a la iluminació n de edificios y terrenos. La falta de cuidado en el manejo de instalaciones y equipos elé ctricos puede causar graves descargas, quemaduras y, con harta frecuencia, la muerte. El peligro es mayor en sitios hú medos o donde se trabaja con manos o ropas mojadas. En todos los lugares hú medos, o en el caso de los enchufes situados a la intemperie, deben instalarse circuitos de desconexión en caso de pérdidas a tierra. En lugares donde las tormentas son frecuentes o muy fuertes, todos los edificios deben estar provistos de protecció n contra los rayos y debe instruirse a los trabajadores sobre la forma de reducir el peligro de los rayos y de localizar refugios seguros.

sábado, 8 de septiembre de 2007

Prevención de riesgos en el Envasado en la industria de Bebidas (V)

El cloro, que se utiliza en el área de tratamiento del agua, puede ser peligroso en caso de liberación accidental. Normalmente, se recibe en recipientes de acero, que se almacenan en áreas aisladas y bien ventiladas y se sujetan para evitar su inclinación. Se debe formar a los trabajadores para seguir procedimientos seguros en el cambio de recipiente. Tambié n se les ha de enseñ ar có mo tomar decisiones rá pidas si se produce una liberació n accidental de cloro. A finales del decenio de 1990, nuevos compuestos de cloro van sustituyendo paulatinamente al cloro gaseoso. Aunque siguen siendo peligrosos, son mucho má s seguros de manipular que el gas.
El amoniaco se utiliza como refrigerante en las operaciones de embotellado. Normalmente, los grandes sistemas de amoniaco pueden entrañar un riesgo para la salud en caso de fuga o derrame. En las instalaciones de embotellado deben desarrollarse procedimientos de respuesta en caso de emergencia en los que se indiquen claramente las responsabilidades del personal. Los encargados de responder a esas situaciones de urgencia serán formados sobre có mo atajar un derrame y sobre el empleo de respiradores. En caso de fuga o derrame, se debe disponer inmediatamente de los respiradores y evacuar a todo el personal que no sea esencial a zonas seguras hasta que la situación esté controlada.
El CO2 que se utiliza en la operació n de llenado también puede causar problemas relacionados con la salud. Si las salas de llenado y las áreas adyacentes no están suficientemente ventiladas, la acumulació n de CO2 puede desplazar al oxígeno en las zonas de respiració n de los trabajadores. Las instalaciones deben controlarse perió dicamente para evaluar los niveles de CO2 y, si se detectan anomalías, hay que inspeccionar los sistemas de ventilación para determinar sus causas. Para corregir la situación puede ser necesaria ventilación adicional.

jueves, 6 de septiembre de 2007

Accidentes relacionados con vehículos

Las carreteras y caminos de las plantaciones pueden ser estrechos, con el consiguiente peligro de colisiones frontales entre vehículos o vuelcos en la cuneta. Deben existir pasos a nivel seguros para los vehículos de transporte, entre ellos camiones, tractores o remolques de tracción animal. Cuando se utilizan carreteras de doble dirección, deben existir pasos má s amplios a intervalos adecuados para que un vehículo pueda adelantar a otro. En los puentes y a lo largo de los precipicios y barrancos debe construirse un pretil.
Los tractores y otros vehículos imponen dos riesgos principales a los trabajadores. Uno de ellos es el vuelco, con el resultado frecuente de que el conductor es fatalmente aplastado, razó n por la cual deben instalarse sistemas de seguridad contra vuelcos en los tractores. Los tractoristas deben llevar siempre cinturó n de seguridad. El otro problema es el de los atropellos. Los trabajadores deben mantenerse alejados de los caminos por donde circulan los vehículos y no debe permitirse que en los tractores viajen pasajeros, a no ser dispongan de un asiento seguro.

lunes, 3 de septiembre de 2007

Características regionales del sector y de los trabajadores: América Latina y el Caribe

La región de América Latina y el Caribe difiere de las demás en muchos aspectos. Grandes extensiones de tierra permanecen sin ser explotadas, hay un importante censo de animales domésticos en la zona y buena parte de la agricultura se lleva a cabo en grandes explotaciones. La ganadería representa aproximadamente un tercio de la producción agrícola, lo que constituye una parte significativa del producto interior bruto. La carne de ternera aporta el mayor porcentaje, alcanzado el 20 % de la producción mundial. La mayor parte de las especies que se crían son importadas. Entre las especies autóctonas que han sido domesticadas se encuentran cobayas, perros, llamas, alpacas, patos Muscovy, pavos y pollos negros. Esta región contribuyó sólo con el 2,3%a la producción mundial de acuicultura.