domingo, 30 de septiembre de 2012

Mantenimiento e integridad mecánica

Las instalaciones de proceso tienen programas para mantener la integridad continua del equipo utilizado en el proceso, que incluyen inspecciones perió dicas, pruebas, mantenimiento del rendimiento, acciones correctoras y garantía de calidad. Lo que se pretende con estos programas es garantizar que la integridad mecá nica del equipo y los materiales se revisa y certifica, y que se corrigen los defectos antes de la puesta en marcha, o se toman las medidas de seguridad adecuadas.
Los programas de integridad mecá nica se aplican a los equipos y sistemas siguientes:

• recipientes a presió n y tanques de almacenamiento;
• sistemas de parada de emergencia y de protecció n contra incendios;
• defensas del proceso, como los sistemas y dispositivos de alivio de presió n y venteos, los controles, los bloqueos, los sensores y las alarmas;

• sistemas de bombas y de conducción (incluidos componentes
como las vá lvulas);
• garantía de calidad, materiales de construcción y té cnicas de seguridad,
• mantenimiento y programas preventivos de mantenimiento.

Los programas de integridad mecá nica abarcan tambié n la inspecció n y prueba de materiales de mantenimiento, piezas de repuesto y equipos, con el fin de asegurar la instalación adecuada para la aplicació n del proceso en cuestió n. Los crite- rios de aceptación y la frecuencia de las inspecciones y pruebas debe adaptarse a las recomendaciones de los fabricantes, las buenas prá cticas té cnicas, los requisitos legales, las prá cticas industriales, la política de la instalació n o la experiencia previa.

sábado, 29 de septiembre de 2012

Garantías de calidad de diseño

Cuando se inician nuevos procesos o cambios esenciales de los ya existentes, suelen realizarse una serie de revisiones del diseñ o de la seguridad de los procesos antes y durante la construcció n (antes de la revisión previa a la puesta en marcha). La revisió n del control del diseño, realizada inmediatamente antes de la fase en que se consideran los planes y especificaciones como “representaciones definitivas del diseño”, abarca las á reas siguientes:
• planos, situació n, espacio, clasificació n elé ctrica y drenajes;
• aná lisis de riesgos y diseñ o del proceso desde el punto de vista químico;
• requisitos y cualificaciones para la gestión del proyecto;
• diseñ o e integridad de los equipos de proceso y mecá nicos;
• planos de conducciones e instrumentos;
• dispositivos té cnicos fiables de seguridad, de emergencia, de alarma y de bloqueo,
• materiales de construcció n y compatibilidad.

Normalmente se realiza otra revisió n antes del inicio de la construcció n en la que se consideran los aspectos siguientes:
• procedimientos de demolició n y excavació n;
• control de las materias primas;
• control del personal de construcció n y equipamiento en la instalació n y en el lugar donde é sta se halle.
• procedimientos de fabricació n, construcció n e instalació n,
e inspecció n de los mismos.

Por lo comú n, se realizan una o má s revisiones en el curso de la construcció n o modificació n para garantizar que se cumplen las especificaciones del diseñ o y los requisitos de la instalació n en los á mbitos siguientes:
• los materiales de construcció n se suministran y se utilizan de la forma especificada;
• las té cnicas, inspecciones, verificaciones y certificaciones de montaje y soldadura son las correctas;
• se tienen en cuenta los riesgos químicos y de salud profesional durante la construcción;
• se tienen en cuenta los riesgos físicos, mecá nicos y de seguridad en el trabajo durante la construcció n; ademá s de la obser- vancia de autorizaciones y prá cticas de seguridad en la instalación,
• se dispone de sistemas de protecció n provisionales y de respuesta a emergencias, y se hallan en funcionamiento.

viernes, 28 de septiembre de 2012

Revisiones de seguridad antes de la puesta en marcha

En las plantas químicas, las revisiones de la seguridad del proceso previas a la puesta en marcha se realizan antes de poner en marcha nuevas instalaciones de proceso o introducir nuevos materiales o productos químicos peligrosos en las instalaciones, despué s de un ciclo de parada importante o de modificaciones significativas de los procesos.
Las revisiones de seguridad previas a la puesta en marcha garantizan que se ha realizado lo siguiente:
• se han verificado la construcción y montaje, los materiales y el equipo conforme a los criterios de diseñ o;
• se han inspeccionado, comprobado y certificado los sistemas
del proceso y el hardware, incluido el programa de control del ordenador;
• se han inspeccionado, probado y certificado las alarmas e
instrumentos;
• se han inspeccionado, probado y certificado los dispositivos de emergencia y seguridad y los sistemas de señ ales;
• se han inspeccionado, probado y certificado los sistemas de protecció n y prevenció n de incendios;
• se han desarrollado y revisado los procedimientos de segu- ridad, prevenció n de incendios y respuesta de emergencia, que han de estar en su sitio y ser los adecuados;
• los procedimientos de puesta en marcha está n instalados y se han iniciado las acciones adecuadas;
• se han analizado los riesgos del proceso; abordado, aplicado o resuelto todas las recomendaciones, y documentado las acciones;
• se ha completado toda la formació n inicial y/o de recuerdo exigida al personal de funcionamiento y mantenimiento, incluidas la respuesta de emergencia, los riesgos del proceso y los riesgos para la salud;
• está n completos y en su sitio todos los procedimientos de trabajo (normal y de cambio de estado), los manuales de funcionamiento, los procedimientos de los equipos y los de mantenimiento,
• se cumplen los requisitos de gestión de cambio para nuevos procesos y modificació n de los ya existentes.

jueves, 27 de septiembre de 2012

Equipo de campamento, equipo de campo y maquinaria

Todos los equipos (sierras de cadena, hachas, martillos neumá ticos, machetes, radios, estufas, linternas, equipos geofísicos y geoquímicos) deben mantenerse en buenas condiciones. Cuando, a efectos de seguridad personal, sea necesario utilizar armas de fuego contra animales (osos, etc.), su uso estará estrictamente controlado y supervisado.



miércoles, 26 de septiembre de 2012

Medidas sanitarias.

El campamento debe contar con un suministro de agua potable segura. En caso necesario, se compro- bará la pureza de la fuente. Si fuera asimismo necesario se almacenará el agua potable en recipientes limpios y etiquetados separados del agua no potable. Los suministros de alimentos deben examinarse a su llegada para comprobar su calidad e introducirse inmediatamente en un refrigerador o almacenarse en depósitos para evitar que puedan acceder a ellos insectos, roedores u otro tipo de animales. Los lavabos deben estar situados cerca de las zonas de comedores y de las letrinas. Estas últimas deben cumplir las normas de salud pú blica y
estar situadas como mínimo a 100 m de cualquier corriente de agua o costa.

martes, 25 de septiembre de 2012

Control de incendios y manipulación de combustibles.

Los campamentos deberían situarse de forma que las tiendas o estructuras esté n relativamente alejadas entre sí para evitar o reducir el peligro de propagació n de incendios. El equipo contra incen- dios debe conservarse en un depó sito central, aunque han de existir extintores en las cocinas y edificios de oficinas. La normativa para fumadores contribuye a evitar incendios tanto en el campamento como en el lugar de trabajo. Todos los trabajadores deben participar en los simulacros de incendios y conocer los planes de evacuació n en caso de un incendio real. Los combustibles deben estar etiquetados de forma clara para garantizar que se utiliza el correcto para las linternas, estufas, generadores, etc. Los depó sitos de combus- tible deben estar situados como mínimo a 100 m del campamento y a una altura superior al nivel potencial de inundació n o marea alta.

lunes, 24 de septiembre de 2012

Medidas preventivas en el campamento

Los aspectos de salud y seguridad varían en función del lugar y el tipo de trabajo que se realiza en el campamento. En la instalación de un campamento debe tenerse en cuenta la normativa local sobre incendios, salud y seguridad. Un campamento limpio y ordenado ayuda a reducir el número de accidentes.
Localización. El campamento se montará lo más cerca posible del lugar de trabajo y respetando las normas de seguridad, con el fin de minimizar los desplazamientos y la exposició n a los peligros derivados del transporte. Un campamento debe estar situado lejos de cualquier peligro natural, teniendo en cuenta asimismo las costumbres y el há bitat de los animales salvajes pró ximos al campamento (insectos, osos, reptiles, etc.). Siempre que sea posible, debería situarse cerca de una fuente de agua potable (vé ase la Figura 74.4). Cuando se trabaje a gran altura, el campamento debe estar situado a un nivel inferior con el fin de evitar el mal de altura.


domingo, 23 de septiembre de 2012

Animales de tiro en Australia

El continente australiano fue colonizado por los europeos en 1788. Las vacas fueron introducidas a la vez que las primeras ovejas, pero escaparon a los bosques circundantes. En aquellos días el arado y otros preparativos de la tierra se hacía con bueyes

pesados, y el cultivo menos pesado con bueyes normales o con caballos. El carro de bueyes se convirtió en el método estándar de transporte por tierra en Australia, y así siguió hasta que se inició y generalizó la construcción de carreteras y del ferrocarril siguiendo las rutas del oro desde 1851 en adelante.
En Australia, otros animales de tiro son el camello y el burro. Aunque se emplean mulas, nunca llegaron a ser populares en Australia (Auty 1983).

sábado, 22 de septiembre de 2012

Gestión

La alimentación diaria de los animales de tiro varía en función de la estación de trabajo. Tanto el ganado bovino como los búfalos que se emplean para tiro se alimentan en confinamiento
(todo el año) mediante un sistema de corte y transporte, con escaso o nulo apacentamiento. Se le suministra caña de arroz todo el año, dependiendo de las preferencias del granjero, en cantidades de 8 a 10 kg al día, o según sea necesario. Cuando hay, se les alimenta con otros residuos de la cosecha como cáscaras de arroz, paja y puntas de caña. Además de estos resi- duos de cosecha, durante la estación de lluvias (de abril a noviembre) se suministra hierba segada o comida por los animales en los bordes de los caminos y en los terraplenes, en cantidades de 5 a 7 kg/día y puede aumentarse cuando hay mucho trabajo hasta 10 kg/día.
La alimentación de los animales de tiro puede completarse con pequeñas cantidades de concentrados de subproductos como salvado, tortas de aceite, legumbres, cáscara de arroz
y melaza. La forma predominante de proporcionar estos concentrados es la forma líquida, mezclando todos los ingre- dientes. Los tipos y cantidades de ingredientes varían según el trabajo diario del animal, la zona geográfica, y las preferencias
y posibilidades del granjero. Durante las estaciones en las que hay más trabajo se incrementan las cantidades de concentrados que se suministran, y se reducen durante el monzón, que es cuando hay menos trabajo.
Los granjeros también eligen los ingredientes de la alimenta- ción de los animales en función de su disponibilidad, su precio
y la percepción y comprensión de su valor nutritivo. Por ejemplo, durante la estación de trabajo que va de noviembre a junio, la ración diaria puede consistir en: 200 g de torta de aceite de semilla de mostaza con 100 g (peso seco) de arroz hervido;
3/4 g de torta de aceite de semilla de mostaza, 100 g de arroz hervido o 3/4 g de melaza; o 2 kg en total de torta de aceite de sésamo, arroz pelado, salvado de trigo y arroz hervido a partes iguales, junto con sal. En los días de trabajo real de este período
(163 días), los animales reciben un 50 % de estas mismas raciones. Si los animales reciben algún tipo de concentrado en la estación en que no trabajan, la cantidad oscila entre 1/4 y
1/2 kg.

viernes, 21 de septiembre de 2012

Salud.

. El estrés del trabajo puede alterar el equilibrio que a menudo existe entre los animales sanos y los parásitos.

jueves, 20 de septiembre de 2012

• Equipo.

. La mayor parte del equipo de las granjas está anticuado y es improductivo. Gran parte del equipo que se emplea con los animales de tiro (arneses, aperos de labranza y remolques) es de tipo tradicional, cuyo diseño no ha variado en centenares de años. Además, los utensilios de la granja a menudo están mal diseñados y logran un escaso rendimiento.

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Cuestiones de personal

Las cuestiones de personal pueden dividirse en:

Formación y enseñanza permanente. En algunos países, esto incluye
a los empleados de las empresas forestales; por ejemplo, quienes trabajan con motosierras están obligados a asistir a cursos apropiados de formación y enseñanza permanente.

martes, 18 de septiembre de 2012

Cuestiones de organización

En la empresa y en el lugar de trabajo deben establecerse condi- ciones para que los trabajos individuales puedan realizarse con seguridad. Para que esto ocurra, deberán abordarse las siguientes cuestiones:

• clara definición de las tareas, autoridad y responsabilidades de todos los participantes;
• un sistema salarial que favorezca la seguridad;
• jornada laboral y descansos adaptados a las dificultades del trabajo;
• procedimientos de trabajo;
• planificación y organización del trabajo;
• alarmas y primeros auxilios,
• si los trabajadores han de vivir en campamentos, definición de requisitos mínimos para los dormitorios, saneamiento, nutri- ción, transporte y ocio.


lunes, 17 de septiembre de 2012

Cuestiones técnicas

El estado de la tecnología en parte de los equipos y dispositivos forestales, como motosierras, limpiatrochas, protección para las piernas de los operarios de motosierras, etcétera, se establece en normas internacionales, tal como se trata en otras partes de este mismo capítulo. A largo plazo, deberán unificarse las EN y las normas de la Organización Internacional de Normalización
(ISO). La adopción de estas normas por cada país contribuirá a la protección uniforme del empleado de la industria. La demos- tración del vendedor o fabricante de que un determinado equipo cumple estas normas garantiza al comprador que el equipo se corresponde con el estado de la tecnología. En los numerosos casos en los que no existen normas internacionales, es necesario que se definan requisitos nacionales mínimos por parte de grupos de expertos.
Además del estado de la tecnología, son importantes las siguientes cuestiones, entre otras cosas:

• disponibilidad de los equipos y materiales necesarios en el trabajo;
• estado fiable de los equipos y materiales,
• mantenimiento y reparación.

Las operaciones forestales suelen dejar mucho que desear en estos aspectos.

domingo, 16 de septiembre de 2012

Contenido de las normas en materia de seguridad

Una vez analizados los peligros de ciertos trabajos o tipos de equipos y enunciados los objetivos de protección, pueden formu- larse medidas en los ámbitos de tecnologías, organización y personal (TOP).

sábado, 15 de septiembre de 2012

Empaquetado y refrigeración (II)

El área o las cámaras de refrigeración plantean otro tipo de riesgos de incendio, de salud y de seguridad. En cuanto a la prevención de incendios, el envoltorio del producto constituye un peligro, ya que suele fabricarse con poliestireno altamente combustible. El aislamiento de las paredes suele tener un núcleo de goma esponjosa de este material. Las cámaras frigoríficas deben protegerse adecuadamente con sistemas de pulveriza- dores en seco de acción preliminar diseñados para abordar riesgos extraordinarios. (En los sistemas de acción preliminar se emplean pulverizadores automáticos acoplados a los sistemas de conducción que contienen aire seco o nitrógeno, así como un sistema de detección complementario instalado en la misma área que los pulverizadores).
Una vez que las cestas de bandejas entran en la cámara frigo- rífica, los trabajadores deben recogerlas y levantarlas hasta la altura del hombro o superior para apilarlas en una plataforma móvil. Cuando las pilas de cestas ganan en altura, los trabaja- dores tienen que ayudarse entre sí para amontonarlas en niveles superiores.
Las temperaturas en estas cámaras pueden alcanzar los –2 °C. Los trabajadores deben recibir ropas de múltiples capas o “trajes anticongelación”, además de calzado aislante con dispositivos de seguridad, y formación para utilizar estos equipos. Las plata- formas móviles y las pilas de cestas deben ubicarse en diversas áreas de las cámaras frigoríficas hasta que sean reclamadas. A menudo, los trabajadores intentan ahorrar tiempo empujando varias pilas de bandejas al mismo tiempo, lo que puede dar lugar
a lesiones musculares y de la parte inferior de la espalda.
La integridad de las cestas es un aspecto importante, tanto del control de la calidad del producto, como de la seguridad de los trabajadores. Si se acumulan rotas con otras completas apiladas en la parte superior, el conjunto de la carga se vuelve inestable y puede volcarse con facilidad. Los paquetes de producto caen sobre el suelo y se ensucian o deterioran, lo que obliga a repetir tareas y a realizar una manipulación extraordinaria a los traba- jadores. Asimismo, las pilas pueden caer sobre otros miembros del personal.
Cuando se solicita una combinación de producto específica, las cestas pueden retirarse de la pila a mano. Las bandejas se cargan en un transportador con una balanza que las pesa y las marca con etiquetas en las que figuran el peso y los códigos de seguimiento. Las bandejas se embalan manualmente en cajas de cartón o de otros materiales, en ocasiones forradas con cubiertas impermeables. A menudo, los trabajadores deben coger las bandejas. Como en el caso del proceso de empaquetado, los paquetes de producto más grandes y pesados pueden provocar estrés en las manos, los brazos y los hombros. Los trabajadores se mantienen de pie durante mucho tiempo en una única ubicación. Las esteras antifatiga pueden reducir la tensión en las piernas y la parte inferior de la espalda.

viernes, 14 de septiembre de 2012

Empaquetado y refrigeración (I)

Una vez que el producto se ha situado en bandejas trinchado o deshuesado, éstas se trasladan a otra fase del proceso denominada empaquetado. Los trabajadores recogen los productos específicos en bandejas y las introducen en máquinas que aplican y extienden envueltas transparentes impresas alrededor de las mismas selladas en caliente. A continuación la bandeja pasa por un dispositivo de lavado, donde se recoge y se coloca en una cesta. La que contiene un determinado tipo de producto se sitúa en un transportador que la traslada al área de refrigeración. Allí las bandejas son clasificadas y apiladas de modo manual o automático.
Los trabajadores del área de empaquetado deben permanecer de pie durante períodos prolongados y sus puestos son objeto de rotación, con el fin de que las manos que utilizan para recoger el producto cambien de forma alternativa. Se trata de una zona que suele ser relativamente seca. Las esteras amortiguadoras pueden reducir la fatiga de piernas y espalda.
La demanda de los consumidores, las ventas y el marketing pueden crear riesgos ergonómicos especiales. En ciertas épocas del año, se empaquetan grandes bandejas con varios kilos de producto para “comodidad y ahorro de costes”. Es un peso añadido que ha contribuido al aumento de las lesiones de la mano relacionadas con movimientos repetitivos debido, sencillamente, a que el proceso y el sistema de transporte están diseñados para la recogida con una sola mano. Un trabajador carece de la fuerza necesaria para realizar levantamientos de bandejas sobrecargadas con una sola mano.
El envoltorio de plástico transparente utilizado en el empaquetado puede liberar cantidades moderadas de monómeros y otros productos de descomposición al calentarse para su sellado. Si se plantean quejas respecto a los humos, el fabricante o el proveedor de la película plástica debe ser convocado para ayudar a evaluar el problema. Puede ser necesario aplicar sistemas de extracción localizada. El equipo de sellado por calor debe mantenerse adecuadamente y los interruptores de emer- gencia deben comprobarse para controlar su correcto funcionamiento al comienzo de cada turno.

jueves, 13 de septiembre de 2012

Deshuesado (II)

La cuarta fase consiste en el cortado en filetes. Los trabajadores se sitúan de pie, hombro con hombro, y recogen la carne de pechuga transportada en bandejas de transmisión situadas en frente de ellos. Hay ciertas técnicas que deben aplicarse en esta parte del proceso. Es necesario impartir una instrucción adecuada al puesto y una corrección inmediata de los errores observados. Los trabajadores se protegen una mano con un guante de malla o con una cadena, mientras que con la otra sostienen un cuchillo muy afilado (con una punta que puede presentar esta misma condición).
El ritmo de la actividad es rápido, y los trabajadores que se retrasan se ven obligados a tomar atajos, como recoger la carne poniéndose delante de los compañeros cercanos o intentar llegar
a una bandeja que se desplaza fuera de su alcance pinchando la carne con el cuchillo. El pinchazo no sólo reduce la calidad del producto, sino que también provoca graves lesiones a los traba- jadores vecinos en forma de desgarrones, que se infectan a menudo. Pueden utilizarse protectores de plástico en los brazos para evitar este tipo de accidente frecuente.
La carne en filetes vuelve a colocarse en los recipientes de la cinta transportadora y, posteriormente, es recogida por el siguiente grupo de trabajadores, denominados recortadores. Son ellos los que eliminan de la carne la grasa, la piel y los huesos sobrantes utilizando unas tijeras afiladas y ajustadas. Una vez arreglado, el producto terminado se envasa en una bandeja a mano o se guarda en bolsas a granel y se coloca en cajas de cartón para su uso en restauración.

El segundo método de deshuesado requiere la intervención de un equipo de elaboración automático desarrollado en Europa. Como ocurre en el método manual, las cajas a granel o los depósitos con los cuerpos de las aves, en ocasiones aún con las alas, se cargan en una mesa vibratoria o en una rampa. A conti- nuación, los cuerpos pueden recogerse manualmente y situarse en transportadores segmentados o colocarse individualmente, también a mano, en soportes de la máquina. Esta se mueve con rapidez, haciendo pasar el cuerpo a través de una especie de dedos (para eliminar la piel), hojas y cortadoras. El resultado es un esqueleto sin carne que se apila y se utiliza en otras áreas. La mayoría de los puestos de la cadena de producción manual se suprimen, excepto el que ocupan los recortadores con las tijeras. Los trabajadores dedicados al deshuesado están expuestos a graves riesgos ergonómicos derivados de la naturaleza forzada
y repetitiva de su actividad. En cada uno de los puestos de la fase de deshuesado, y en especial los ocupados por los filetea- dores y los recortadores, la rotación de tareas puede ser un elemento esencial en la reducción de los factores de estrés ergo- nómico. Debe entenderse que, en el nuevo puesto al que se asigna un trabajador, no debe utilizarse el mismo grupo muscular. Se ha argumentado sin mucho fundamento que los fileteadores y los recortadores pueden intercambiar sus posiciones, pero no debe permitirse, ya que se emplean los mismos métodos de agarrado, giro y volteo en la mano que no sostiene la herramienta (cuchillo o tijeras). Puede argüirse que los músculos que sostienen un cuchillo sin apretar para girar y voltear al realizar cortes para obtener filetes se utilizan de manera diferente al abrir y cerrar unas tijeras. No obstante, los giros y volteos de la mano siguen siendo necesarios. Las veloci- dades de la cadena productiva desempeñan un papel primordial en el planteamiento de trastornos ergonómicos en estos puestos de trabajo.

miércoles, 12 de septiembre de 2012

Deshuesado (I)

Si el cuerpo se destina al deshuesado, se deposita en grandes cubas de aluminio o en cajas de cartón situadas en paletas. La carne de pechuga debe conservarse durante un cierto número de horas antes de su elaboración mecánica o manual. El pollo fresco es difícil de cortar y preparar a mano. Desde un punto de vista ergonómico, el envejecimiento de la carne es un elemento esencial que contribuye a reducir las lesiones de la mano provocadas por la reiteración de movimientos.
Hay dos métodos utilizados en el deshuesado. En el manual, una vez preparados, los cuerpos de la aves en los que solo queda la carne de la pechuga se vierten en una tolva que va a parar a una transportador. Los trabajadores de esta sección de la cadena de producción deben manipular cada cuerpo de ave y sujetarlos contra dos rodillos desolladores horizontales texturados. El cuerpo pasa a través de los dos rodillos y la piel es retirada y arrojada a un transportador inferior. Existe el riesgo de que los trabajadores se descuiden o se distraigan y metan los dedos entre los rodillos. Es necesario disponer de interruptores de parada de emergencia al alcance de la mano libre o de la rodilla. No pueden utilizarse guantes ni ropas sueltas en la cercanía de estos equipos. Deben emplearse delantales (perfectamente ajustados)
y protectores oculares debido a la posibilidad de contacto con fragmentos de los huesos.
La fase siguiente es llevada a cabo por trabajadores denomi- nados marcadores. Sostienen el cuerpo del ave en una mano y realizan un corte a lo largo de la quilla (o esternón) con la otra. Suelen emplearse cuchillos afilados de hoja corta. Normal- mente, se utilizan guantes de malla de acero inoxidable sobre otros guantes de látex o de nitrilo que recubren la mano que sujeta el cuerpo. Los cuchillos aplicados en esta operación no necesitan tener una punta afilada. Es conveniente utilizar protectores oculares.
La tercera fase corre a cargo de los extractores de quillas. Su tarea puede efectuarse a mano o con un dispositivo en forma de “Y” (realizado con una estructura de barras de acero inoxidable) en el que el trabajador sitúa el cuerpo del ave y tira de éste hacia sí. La altura de cada dispositivo debe ajustarse al trabajador. El método manual exige sencillamente al trabajador la utilización de unas tenazas con la mano enguantada para extraer la quilla. Como ya se ha descrito, deben emplearse protectores oculares.

martes, 11 de septiembre de 2012

Arroz: Proceso de cultivo (II)

Trasplante. Las plantas jó venes, en haces de 3 a 5, se intro-
ducen en el fango en hileras y se dejan durante diez días. Transcurridos é stos, se drena el agua para que el sol dé direc- tamente en las raíces. A eso de los cuarenta y cinco días, las plantas han alcanzado su pleno desarrollo y empiezan a llevar grano.
5. Recolección. Cuando la planta tiene unos 100 días, suele
segarse a mano (vé ase la Figura 64.26) utilizando una hoz o alguna herramienta similar.
6. Secado. El secado se realiza al sol para conseguir que el conte-
nido de humedad descienda a menos del 15 %.
7. Trilla. La trilla tiene por objeto separar el grano con su cá scara o gluma del tallo. El arroz se suele trillar tan pronto como se cosecha. El mé todo tradicional consiste en utilizar carabaos o bueyes para arrastrar lentamente el trillo sobre las gavillas extendidas y desprender el grano, aunque en muchos lugares la trilla se realiza mecá nicamente.
8. Almacenamiento. El grano y la paja se almacenan en graneros o
silos.

lunes, 10 de septiembre de 2012

Arroz: Proceso de cultivo (I)

El arroz puede cultivarse manualmente o con mecanización parcial o total, segú n el desarrollo tecnoló gico del país y la necesidad de productividad. Cualquiera que sea el tipo de operación realizada, son siempre necesarias las siguientes etapas:

1. Arado. La tierra se ara en tres momentos distintos para eliminar terrones y ablandar el suelo lo más posible. Cara- baos, bueyes o vacas suelen tirar de los arados, aunque está aumentando el uso de equipos mecá nicos.
2. Escarda. La escarda se lleva a cabo tres veces irrigando el
campo durante cinco días cada vez y luego dejá ndolo secar otros cinco. Al final de cada ciclo se golpea la tierra con una pesada herramienta de madera para matar las malas hierbas
y que puedan servir de abono natural.
3. Preparación de la simiente. Se sumergen las semillas en un gran
recipiente lleno de agua a la que se añ ade la concentració n adecuada de sal para que las semillas sanas floten. A conti- nuació n se lavan bien estas semillas sanas, se dejan toda la noche en remojo y, despué s de envolverlas en una tela o saco gruesos durante dos noches má s para que germinen, se siem- bran en la tierra preparada y se las deja crecer unos treinta días aproximadamente.

domingo, 9 de septiembre de 2012

ARROZ

El arroz es el alimento bá sico de la població n asiá tica; se prepara cocié ndolo o molié ndolo para obtener harina con la que se hace pan, ayudando así a alimentar al resto de la població n mundial. Se cultivan distintas variedades de arroz para adaptarse a las preferencias de los consumidores. El cultivo de arroz se realiza en tierras bajas y pantanosas con abundancia de agua, o en zonas montañ osas y mesetas donde el ré gimen natural de lluvias procura cantidades adecuadas de agua.

sábado, 8 de septiembre de 2012

Seguridad de la maquinaria

La seguridad de la má quina obliga ante todo a conservar las protecciones y las cubiertas originales en su sitio y a mantenerlas adecuadamente. Se deben utilizar etiquetas de advertencia para recordar que las protecciones y cubiertas deben mantenerse en su sitio. Si é stas tienen han de retirarse para el mantenimiento, servicio o ajuste, deberán ser sustituidas inmediatamente al terminar la reparació n. Han de seguirse prá cticas seguras de trabajo. Por ejemplo, el tractor debe apagarse y la TF o los sistemas hidrá ulicos de bloqueo inactivarse antes de desconectar o revisar el equipo. Se deben leer los manuales de usuario y seguir sus instrucciones de seguridad. Los trabajadores han de recibir la formació n adecuada.