Los riesgos en la producción de árboles frutales y palmeras son accidentes, exposiciones naturales, exposición a plaguicidas, problemas respiratorios y dermatitis. El cultivo de muchos á rboles tropicales y palmeras exige trabajar a altitudes elevadas. El popular plátano de Guinea alcanza 5 m de altura, el kapok 15 m, los cocoteros entre 20 y 30 m y la palmera datilera siempre verde 12 m. Las caídas representan uno de los riesgos má s graves en el cultivo de árboles tropicales, y lo mismo puede decirse de la caída de objetos. Siempre deben utilizarse arneses de seguridad y protectores para la cabeza y debe enseñarse a los trabajadores a utilizar esos equipos. El uso de variedades enanas de las palmeras puede ayudar a evitar las caídas de los árboles. Las caídas del árbol del kapok por rotura de las ramas y las pequeñas lesiones que se producen en las manos cuando se rompe la cáscara son también otros riesgos.
Los trabajadores pueden sufrir un accidente durante su transporte en camiones o remolques tirados por tractores. Los traba- jadores que trepan a las palmeras sufren cortes y abrasiones en las manos por el contacto con las espinas afiladas de la palmera datilera, el fruto de la palma de aceite o las hojas espinosas del sisal. Las dislocaciones por caídas en zanjas y agujeros constituyen otro problema. Los trabajadores pueden tambié n sufrir graves heridas con los machetes. Los trabajadores, normalmente mujeres, que transportan las cajas de plá tanos, tienen que alzar pesadas cargas. Los tractores deben disponer de cabinas de segu- ridad. A los trabajadores se les debe instruir sobre el manejo seguro de los aperos de labranza, las carcasas protectoras de la maquinaria y el manejo seguro de los tractores. Deben utilizar guantes que les proteja contra los pinchazos y utilizar siempre protectores de los brazos durante la recolecció n del fruto de la palma de aceite. La mecanizació n de la escarda y el cultivo reduce las dislocaciones por caídas en zanjas y agujeros. Siempre deben utilizarse unas prá cticas de trabajo seguras y adecuadas, como mé todos correctos para levantar pesos, solicitar ayuda para transportar cargas de manera que el peso se reparta entre un mayor nú mero de personas y descansar cada cierto tiempo. Entre los riesgos naturales figuran las serpientes —un problema cuando se despejan los bosques y en plantaciones nuevas—, los insectos y enfermedades como paludismo, anci- clostomiasis, anemia e infecciones enté ricas. La operació n de enríado expone a los trabajadores a pará sitos e infecciones cutá - neas. El control de los mosquitos, la higiene y el acceso a agua potable son muy importantes.
La intoxicació n por plaguicidas es un riesgo en la producció n de árboles tropicales, puesto que en las huertas frutales se utilizan plaguicidas en cantidades importantes. Las palmeras tienen pocos problemas de plagas y é stas afectan exclusivamente a algunas partes del ciclo de vida, pudiendo identificarse para un control específico. La gestió n integrada de plagas y, en el caso de aplicar plaguicidas, el seguimiento de las instrucciones del fabri- cante, son importantes medidas protectoras.
Las evaluaciones mé dicas han identificado casos de asma bronquial entre los trabajadores de los dá tiles, probablemente por la exposició n al polen. Tambié n se han dado en estos traba- jadores casos de eczema seco cró nico y “enfermedad de las uñ as” (oniquia). Durante el proceso de polinizació n deben utilizar protectores respiratorios y cuando trabajan con á rboles y dá tiles deben protegerse las manos y lavá rselas con frecuencia para evitar problemas dermatoló gicos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario